Laura Castro Loera, un ejemplo de disciplina en enfermería

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  • … con más de 35 años de trayectoria.
  • En el área de Habitación Conjunta, donde apoya a las mujeres a traer una nueva vida desde la gestación hasta el fomento a la lactancia materna.

César Rodríguez / La Voz de Durango

Desde los inicios de la humanidad, la figura del cuidador ha estado presente en todos los ámbitos de la historia. Desde los primeros colectivos humanos donde siempre han existido personas incapaces de valerse por sí mismas, estas ya recibían cuidados propios de este oficio por parte de otros miembros de la tribu, principalmente mujeres, las cuales se dedicaban mayormente al cuidado de los niños y a la recolección.

El primer manual conocido de la enfermería como disciplina data del 1617 y recoge una serie de instrucciones para enfermeros donde se describen técnicas y procedimientos para practicar a los enfermos. En 1860 se dieron a conocer los cimientos de la enfermería profesional y se estableció una escuela propia de enfermería en Londres llamada Saint Thomas Hospital que aún funciona en la actualidad.

En Durango, como en todo el país, la enfermería ha cambiado a través de los años, la medicina se ha actualizado y esta es una profesión tan demandante, que además de las largas jornadas de trabajo, se deben aprender nuevos procesos, compartió para La Voz de Durango, Laura Castro Loera, destacada enfermera con 36 años de servicio en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), Dr. Santiago Ramón y Cajal.

Mencionó que el servicio al ser humano lo desarrollo desde muy joven, posteriormente al concluir sus estudios ingresó a laborar en el nosocomio en 1985 y un año después por su destacada labor recibió su base.

“Me gustó la enfermería porque es una atención al ser humano, te sientes contenta y feliz al dar tu mayor esfuerzo día con día, cuando vemos que el paciente reacciona y mejora día con día y después se da de alta, es una satisfacción personal que creo pocos trabajos te pueden dar”.

Actualmente labora en el área de Enfermería Conjunta, donde apoya a las mujeres a traer una nueva vida, desde la gestación hasta el fomento a la lactancia materna.

Su día comienza desde las 06:00 horas, donde rápidamente se alista y traslada al nosocomio, para atender hasta doce pacientes de manera conjunta entre recién nacidos y madres, además de brindar información a los familiares.

“Tenemos una atención para los recién nacidos, fomentamos la lactancia materna, es parte de mi trabajo y buscamos ese vinculo entre madre e hijo, últimamente es un departamento muy demandante”.

MENSAJE A LAS NUEVAS GENERACIONES

De tal manera, Laura Castro Loera hizo hincapié en la pasión con la que se debe llevar la enfermería, y es que esta labor no tiene tiempo para el “después”, las situaciones se deben de resolver de manera inmediata pues la salud de las personas está en juego, por lo que la disciplina es fundamental.

“Mi mensaje a las nuevas generaciones es que se preparen y traten de destacarse, el camino y el trabajo no es fácil, pero si le gusta busquen mejorar y capacitarse, nunca dejamos de aprender, la atención al ser humano es la labor mas loable”.