- Migran familias enteras.
- Los principales municipios afectados se encuentran Tamazula, Santiago Papasquiaro, Topia, Otáez y Canelas.
César Rodríguez / La Voz de Durango
Durango enfrenta una de las peores sequías de la última década, registrada durante el 2023. Esta adversidad ha impactado de manera contundente la producción agrícola y ganadera, generando una profunda crisis económica en el sector rural. Según lo expresado por el diputado local, Joel Corral Alcántar, la sequía ha obligado a familias enteras a migrar hacia otras ciudades debido al aumento significativo de la pobreza alimentaria, resultado directo de este fenómeno climático desafiante.
La crisis hídrica proyecta su sombra sobre el 2024, con perspectivas alarmantes para los meses venideros, según indican diversas autoridades. Los municipios más afectados por esta sequía prolongada incluyen Tamazula, Santiago Papasquiaro, Topia, Otáez y Canelas, donde la escasez de lluvias ha golpeado duramente los cultivos y la ganadería, actividades fundamentales para la economía local.
Frente a este panorama desafiante, se hace necesario un apoyo extraordinario por parte del Gobierno federal. La magnitud de la sequía trasciende las capacidades de los gobiernos locales, por lo que es esencial implementar medidas urgentes para mitigar los efectos devastadores en el sector rural y brindar asistencia a las comunidades afectadas, explicó el legislador.
La crisis hídrica en Durango no sólo representa una amenaza para la seguridad alimentaria y económica de la región, sino que también subraya la urgente necesidad de adoptar estrategias a largo plazo para hacer frente al cambio climático y proteger los recursos naturales de la entidad.