- No obstante, se debe de contemplar a detalle el tema de la productividad e ingresos, puesto que estos factores son determinantes para tomar la decisión.
César Rodríguez / La Voz de Durango
Actualmente, el país se encuentra en una encrucijada para implementar la reducción laboral de 48 a 40 horas semanales, puesto que mientras algunos defienden la utilidad para la vida familiar y la salud mental, el sector empresarial advierte sobre posibles consecuencias negativas en la productividad y la economía, donde la inversión extranjera buscaría otros países para instalarse.
En tal sentido, la titular del Instituto de Salud Mental del Estado de Durango (ISMED), María Soledad Ruiz Canaán, indicó que varios estudios avalan que trabajar más de 40 horas semanales impacta directamente en los niveles de estrés de los trabajadores, mismos que derivan en un aumento de cuadros de ansiedad y depresión derivados de una fuerte carga laboral.
No obstante, Ruiz Canaán, aseveró que se debe de contemplar el tema de la productividad e ingresos, puesto que estos son factores determinantes para tomar una decisión, donde tanto las empresas como los empleados resulten beneficiados.
De tal manera, detalló que las empresas deben de contar con psicólogos y trabajadoras sociales, a fin de que el empleado cuente con asesoría para mantener y mejorar su salud mental, lo cual impactaría de manera benéfica a la productividad del colaborador.
Asimismo, hizo hincapié que las remuneraciones deben de ser las adecuadas, puesto que si bien se va a contar con mayor tiempo para descanso, la falta de empleo e ingresos menores a los gastos, son los principales motivos de estrés entre las personas.
“Sí a las 40 horas, pero el cómo y las circunstancias que estén adecuadas para los empleados, se puede trabajar seis horas, pero si hay hostigamiento, malos tratos y violencia psicológica, el colaborador lo va a pasar mal”, concluyó.