- Cada año, la temporada de lluvias resulta en afectaciones para los vehículos, desde llantas ponchadas, hasta daños de suspensión y sistema eléctrico.
César Rodríguez / La Voz de Durango
Año con año, la temporada de lluvias trae serias afectaciones al parque vehicular en la ciudad, unidades que sufren averías por inundaciones y los daños al pavimento que la acumulación de agua provoca.
En entrevista para La Voz de Durango, los automovilistas definen a los baches como un dolor de cabeza que se presenta año con año, problemática que afecta principalmente a aquellos que cuentan con auto tipo sedán, el cual su suspensión es más baja y el daño lo reciben los amortiguadores, rines y neumáticos.
Si bien, la Dirección Municipal de Obras Públicas (DMOP), ha pavimentado una cantidad histórica de metros cuadrados en la mancha urbana, aún falta mucho por hacer, principalmente en aquellas calles donde el paso de vehículos es constante.
En tal sentido, los talleres mecánicos especializados en suspensión y amortiguadores, han reportado un alza de automóviles averiados del 25 por ciento, principalmente por caer en un profundo bache a altas velocidades.
En ese tenor, los afectados señalaron que urge la reparación de calles de manera profunda, tal es el caso de la avenida Colima, misma que a pesar de su reparación persisten las inundaciones, las cuales pasan el nivel de la banqueta.