- En caso de no llover.
- Zona sierra, la más afectada; se concentran trabajos en preservar el vital líquido para el consumo humano y animal: Desarrollo Rural.
César Rodríguez / La Voz de Durango
Los primeros seis meses del 2022 se presentó una grave sequía que impactó en la producción agrícola de la entidad, la cual posteriormente fue abatida por graves inundaciones que terminaron con las cosechas de productores de maíz y frijol.
A decir, del titular de la Dirección Municipal de Desarrollo Rural, José Daniel Salazar, se prevé un escenario similar para este 2023, pues las cabañuelas de enero nunca llegaron y el agua comienza a escasear en el campo duranguense.
Si bien, aún no es necesario trasladar el vital líquido con pipas, se prevé que la sequía se intensifique en mayo, con altas temperaturas que terminarán de evaporar la poca agua del suelo.
De tal manera, la zona más afectada sería la sierra, la cual carece de riego como en el valle, por lo que la siembra temporal es un factor que pone en riesgo a la cosecha.
Indicó que en la dependencia se concentran los trabajos para preservar el vital líquido para el consumo humano y animal, además del apoyo con forraje de avena y bordos de abrevadero.
Finalmente, recalcó que las comunidades de El Pino y El Carrizo cuentan con problemas de escasez de agua, por lo que se mantiene la comunicación con sus habitantes.