- La romería en las afueras de la parroquia fue cancelada para evitar la convivencia de centenares de feligreses.
Josélo Fuentes Delgado/La Voz de Durango
Sin festejo, sin romería, mucho menos con la afluencia de las decenas de fieles devotos de San José, ni pólvora, así transcurrió la conmemoración del Santo y en las inmediaciones de la parroquia que lleva su nombre, situación que afectó a decenas de comerciantes de alimentos y juegos mecánicos que tradicionalmente se instalaban días antes de la festividad, durante y después.
En visita que realizó La Voz de Durango a la parroquia, ubicada en calle Zarco y Gómez Palacio, fue evidente que la primera de las calles no estaba cerrada por la instalación de juegos ni puestos de la tradicional vendimia de cada año.
Igualmente, los listones de color verde con amarillo, pendones y arreglos no aparecieron esta vez en la fachada de la parroquia ni en los domicilios vecinos del lugar.
Al interior solo una persona estaba en oración, mientras que personal auxiliar de la parroquia realizaba labores de mantenimiento en algunas de las bocinas y sistema de sonido.
Así transcurrió el Día de San José, que será recordado como uno donde los creyentes y devotos tuvieron que conmemoran el día desde sus hogares, donde incluso el acto de fe y agradecimiento de la tradicional reliquia con el asado rojo, mole y las siete sopas, se tuvo que posponer para el otro año.