- Relacionados a Cuenta Anual.
- Hizo falta el voto de calidad del Alcalde para tener mayoría y aprobar cifras con demasiadas dudas.
Josélo Fuentes Delgado/La Voz de Durango
Con el voto de calidad del alcalde, Jorge Alejandro Salum del Palacio, se inclinó la balanza para aprobar los Estados Financieros relacionados con la Cuenta Anual del 2019, avalando la votación la totalidad de votos de regidores del Partido Acción Nacional (PAN), en contra la oposición y la abstención del regidor Raúl Medina Samaniego de Movimiento Ciudadano (MC).
Así fue la mañana de este jueves en el Cabildo con varios señalamientos sobre los recursos solicitados en crédito de 50 millones de pesos, participaciones federales retrasadas por 159 millones de pesos, inmuebles rentados de manera innecesaria hasta por 100 mil pesos mensuales en el caso de que pretende ocupar el Instituto Municipal de Arte y Cultura (IMAC) y no hay contrato firmado, supuesta nómina inflada hasta en un 40 por ciento, deuda a proveedores desfasada por más de 40 millones de pesos de los 109 millones con que fue recibida.
Los primeros en dar su razonamiento para no aprobar los estados financieros del bimestre fue la fracción del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en voz de Daniela Hernández y David Payán Guerrero, haciendo la observación que como en ninguna administración las deudas a proveedores estaban incrementadas, sin un calendario programado para pagos.
El Partido del Trabajo (PT) con Primitivo Ríos Vázquez y Cynthia Montserrat Hernández Quiñones, de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), advirtieron manejos poco claros de créditos y de nómina, además de los inmuebles con rentas elevadísimas y costos no propios de una administración en austeridad, lo que amenazaba en convertirse en una bola de nieve.
Razonando su voto en contra, pero dando elementos para dar un voto de confianza al Ayuntamiento, Gerardo García y Martha Palencia Núñez, no obstante Raúl Medina Samaniego dio su voto en abstención para evitar ser tajante en las críticas en los compromisos pendientes, ya que la federación tenía parte de culpa al retrasar los 159 millones de participaciones retenidos desde hace varias semanas para que el Municipio cubriera sus compromisos.