- Por la ineptitud y falta de conocimiento sobre el quehacer de los tribunales.
Graciela Rosales/La Voz de Durango
“La ingratitud es causa de revocación” y es momento de que se aplique el apotegma en el caso de Esteban Calderón Rosas como magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE), cuyo ciclo debe terminar ante el ensoberbecido comportamiento, la ineptitud y falta de conocimiento sobre el quehacer de los tribunales, declaró Rubén Buenrostro, abogado litigante y expresidente de la Barra Mexicana y Colegio de Abogados de Durango, A.C.
La mañana de este viernes, el secretario General de Gobierno, Adrián Alanís Quiñones, acudió a un desayuno de convivencia con aproximadamente 150 integrantes de la Barra Mexicana Colegio de Abogados de Durango, A.C., mismos que aplaudieron a las distintas intervenciones en las que se manifestó la molestia e inconformidad por la actuación de Esteban Calderón Rosas, magistrado presidente del TSJE.
Entre los oradores, el vicepresidente de la Confederación de Colegios y Asociaciones de Abogados de México (Concam), Ignacio Covarrubias González, Rubén Buenrostro, Arturo Granadino y otros más que dejaron de manifiesto que las ilegalidades, irregularidades e inconformidades, se iniciaron hace bastante tiempo, pero la gota que derramó el vaso fue la no ratificación de Carlos Lerma Burciaga como juez de Control y Ejecución del Tribunal de Menores Infractores, cargo que dijeron ahora ocupa el yerno del magistrado presidente, Esteban Calderón Rosas, sin mérito alguno.
Resulta que Carlos Lerma Burciaga, es el único juez en Durango, certificado internacionalmente en materia de justicia para adolescentes, es el Secretario Académico de Jueces, es uno de los más jóvenes, con certificaciones nacionales en Investigación del Delito, juicios Orales por parte de la Secretaría de Gobernación (Segob).
En base a la ley orgánica una vez que los jueces cumplen el periodo de tres años, están sujetos a un período de ratificación y en el caso que nos ocupa, se alega la aplicación de leyes ya derogadas.
Rubén Buenrostro, incluso llamó “dictador” al magistrado presidente, de quien dijo no entiende que el quehacer de los abogados es precisamente en los tribunales y “ese problema le ha impedido gobernar el Tribunal de Justicia, con la capacidad y atingencia que debía de ser”.
En su intervención el conocido litigante pidió a Alanís Quiñones ser el conducto para que las quejas e inconformidades de la comunidad jurídica lleguen al gobernador José Rosas Aispuro Torres.
“Él es abogado y entenderá que el reclamo no es injustificado, es un reclamo justo y creo que le dio la oportunidad al maestro Calderón, porque es maestro de la escuela de Derecho de ser presidente del Tribunal, pero dicen que la ingratitud es causa de la revocación y es el momento de aplicar este apotegma”.
Ya en entrevista por separado, Buenrostro dijo que Calderón Rosas, ha hecho designaciones inapropiadas, que está ensoberbecido y que no escucha propuestas ni comentarios, por eso la inconformidad se salió ya del caudal con la no ratificación de Lerma Burciaga para darle el cargo a un pariente.
Agregó que las irregularidades van desde su llegada con cuestiones ilegítimas, selección de jueces, exámenes de jueces, designación de magistrados, como Yolanda de la Torre Valdez que jamás ha litigado, etc.
En fin -dijo Buenrostro- Calderón Rosas debió resolverle esos temas a Aispuro Torres y posiblemente es uno de los funcionarios que más quejas le ha acarreado, como hoy que comentamos la ineptitud y lo que ha causado en el ámbito judicial.