Por: Alejandra Solís
Queridos lectores, esta semana quiero abordar una pregunta que me hacen frecuentemente: «¿Vale la pena hacer deporte, si siempre existe riesgo de lesionarse?» Es una pregunta válida, especialmente cuando un padre o madre ve la incidencia de lesiones en el deporte que practica su joven atleta. Así que, analicemos los pros y contras de hacer deporte, porque la respuesta te va a sorprender.
LOS CONTRAS: REALIDADES QUE DEBEMOS RECONOCER
Seamos honestos: hacer deporte conlleva riesgos. El más obvio es la tendencia a lesiones. Cada deporte tiene su perfil de lesiones típicas, al grado que se vuelven insignia de ellas, como sucede con la rodilla del corredor, el dedo de beisbolista o el codo de tenista.
También está el desgaste progresivo. La repetición constante de ciertos movimientos puede generar sobreuso en estructuras específicas. Hay que tener en cuenta que esto es acumulativo a lo largo del tiempo, y suele ser un punto ciego para los atletas infantiles o juveniles.
Finalmente, existe el desequilibrio de capacidades atléticas. Los deportes desarrollan ciertas habilidades mientras descuidan otras, creando patrones que pueden dificultar las actividades de la vida diaria. Un ciclista puede tener piernas poderosas, pero flexibilidad limitada en cadera y espalda.
LOS PROS: BENEFICIOS INNUMERABLES
Pero aquí viene lo extraordinario: los beneficios del deporte son sencillamente espectaculares.
A nivel cardiovascular, el ejercicio regular aumenta la capacidad cardíaca, mejora la circulación y optimiza la presión arterial. A nivel celular, produce adaptaciones mitocondriales que literalmente mejoran cómo nuestras células generan energía.
Los efectos neurológicos son fascinantes: el ejercicio mejora la memoria, la concentración y reduce el riesgo de demencia. Así como los beneficios metabólicos entre los que resalta que mejora la sensibilidad a la insulina, y fortalece el sistema inmunológico. Y los psicológicos: reduce la ansiedad, mejora el estado de ánimo y aumenta la autoestima. Por supuesto, la lista de beneficios continúa…
SORPRESA: TODOS LOS CONTRAS TIENEN CURA
Aquí viene la revelación más importante: todos los contras del deporte tienen solución, y esa solución es… ¡Ejercicio!
¿Tendencia a lesiones? El ejercicio terapéutico preventivo reduce significativamente este riesgo. ¿Desgaste por sobreuso? El ejercicio correctivo y el entrenamiento cruzado lo previenen. ¿Desequilibrios musculares? El ejercicio compensatorio los corrige.
El ejercicio terapéutico intencionado es precisamente el antídoto de todos los problemas que puede causar el deporte mal estructurado. El malestar contiene su misma medicina.
LA ECUACIÓN PERFECTA
Cuando estructuras inteligentemente tu actividad física combinando tu deporte favorito con ejercicio correctivo y preventivo, los contras desaparecen y solo quedan los pros. Es la diferencia entre hacer deporte y hacer deporte de manera inteligente con un enfoque integral.
EN CONCLUSIÓN
La pregunta no debería ser si vale la pena hacer deporte, sino cómo hacerlo de manera inteligente. Porque cuando lo analizas desde esta perspectiva, ¡todo en el ejercicio es pro! Los beneficios son innumerables, los riesgos son manejables, y la solución a los riesgos es precisamente más ejercicio bien dirigido.
¡El movimiento es medicina, pero como toda medicina, la dosis y la prescripción importan!
Recuerda: si quieres aprender a estructurar tu actividad física de manera inteligente, agenda una evaluación en Fisioterapia Funcional, contáctame en FISIOTERAPIA FUNCIONAL — Bio Site

