Sara Valenzuela / La Voz de Durango. Hoy se cumple un mes de la desaparición de Carlos Emilio Galván Valenzuela, quien fue visto por última vez festejando con sus primos en el establecimiento Terraza Valentino en Mazatlán, Sinaloa, cuando decidió ir al baño y ya no regresó. Desde entonces, su madre, Brenda Valenzuela Gil, no ha dejado de exigir respuestas ni de clamar por la vida de su hijo.
Cansada de la incertidumbre, de realizar marchas constantes tanto en Durango como en aquel estado. A través de sus redes sociales, Brenda dirigió un mensaje a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y al secretario de Seguridad Omar García Harfuch para que tengan empatía, justicia y compasión por su hijo, así como también solicitar que hagan lo necesario para investigar el caso, localizarlo y garantizar seguridad en el país.
“Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, no les pido que se pongan en mi lugar de madre, les pido que se pongan en el lugar de mi hijo privado de su libertad, víctima de una desaparición forzada. Pónganse ahí aunque sea por un instante, imaginen un mes entero sin vida, sin libertad, sin voz. Desde el primer minuto hemos hecho lo que ustedes demandaron ciudadanamente, denunciamos en tiempo y forma, acortamos datos, ubicaciones, evidencias, testimonios. Emilio desapareció la madrugada del 5 de octubre dentro del baño de terraza Valentino de la ciudad de Mazatlán, un lugar cuyos responsables siguen libres, viviendo con toda indolencia y sin enfrentar consecuencia alguna por haber permitido que un joven desapareciera en su establecimiento, como si la vida fuera desechada. Aquí surge una pregunta que debería romperles el alma. ¿Qué valor tiene la vida de un ser humano para ustedes, porque hoy el primer derecho humano, la vida y la libertad están siendo violentadas de la manera más cruel, cada día que pasa sin que el Estado actúe”, expresó con profunda tristeza.
Han pasado 31 días de dolor, angustia y exigencia, mientras los responsables del lugar siguen en libertad. Por lo que Brenda se pregunta ¿Qué valor tiene la vida de un ser humano para las autoridades?

