>El programa rindió homenaje a grandes compositores de la música mexicana.
Por Juan José Nava / La Voz de Durango
Una gran noche emotiva impregnada de sentimiento tricolor fue el saldo que arrojó por su paso la Orquesta Sinfónica de la Universidad Juárez del Estado de Durango (OSUJED) al presentar un programa íntegramente compuesto por piezas de renombrados compositores mexicanos, a quienes se les rindió un efusivo homenaje interpretando sus piezas a modo de dádiva, para recordar con entereza, ese orgullo de ser individuos de una gran nación.
Fue el Teatro Ricardo Castro la sede que recibió a los más de 60 músicos que rompieron con la tradicional etiqueta de lujo al guardar el saco con corbata y los vestidos elegantes para ataviarse a la usanza mexicana con guayaberas diseñadas de bordados con grecas y detalles específicos, aunado a blusas multicolores alegres, adaptándose a un modo más versátil y de distinción con la intención de ejecutar las notas cómodamente, combinando frescura e identidad.
Bajo la batuta del maestro Jorge Armando Casanova Carreño, el recorrido musical por México transitó por todas las regiones geográficas y latitudes de este terruño, gustando al respetable de principio a fin.
El programa anunció las piezas musicales “Obertura “Analco”” de Alfredo A.González, “De Torreón a Lerdo” de Pioquinto González, “Las Cacerolas”, “Mosaico Mexicano” de Arturo Rodríguez, “Sinfonía India” de Carlos Chávez, “El Sinaloense” de Severiano Briseño y “Mosaico Nacional” de Mateo Oliva.
Finalmente, el sublime poema sinfónico titulado “Huapango” de la inspiración de José Pablo Moncayo fue la cereza del pastel para dar un cierre emblemático a la noche con sus característicos sones veracruzanos que reflejan el espíritu y legado cultural de nuestra mexicanidad. Como era de esperarse, el público ovacionó con gratitud la interpretación, dando cierre al mes de septiembre y por consiguiente, al noveno concierto de la temporada 2025.

