>El actor ha colaborado con grandes directores a lo largo de su carrera, especialmente con Martin Scorsese, con el que ha trabajado en seis ocasiones.
EFE
Leonardo DiCaprio cumple 50 años con una exitosa carrera en Hollywood que se inició en la década de los 90, cuando se convirtió en símbolo de una generación y que hoy es tan conocida por muchas personas.
Su nombre es un homenaje a Leonardo Da Vinci, ya que sus padres consideraron una señal que empezara a dar patadas dentro del vientre de su madre mientras admiraban uno de los cuadros del pintor en le galería de los Uffizi de Florencia, según aseguró el actor en una entrevista para NPR.
Nacido y criado en Los Ángeles, Leonardo Wilhem DiCaprio tuvo la oportunidad de explorar su lado creativo a iniciativa de sus padres y se centró en la actuación desde pequeño, abandonando los estudios.
Aunque empezó con papeles pequeños en televisión, su debut cinematográfico tuvo lugar en una película de terror de bajo presupuesto llamada Critters 3 (1991).
En 1996 casi rechazó participar en la adaptación del clásico shakespeariano de Baz Luhrmann, Romeo + Juliet, que despertó el interés y la adoración de las adolescentes de todo el mundo.
Su personaje de Jack en Titanic no tuvo espacio en la famosa tabla que salvó a Rose (Kate Winslet), pero sí le aseguró nuevos papeles principales. Ayudó que la película gozara de un rotundo éxito: fue la primera en recaudar mil millones de dólares y ganó 11 de sus catorce 14 a los Oscar.
DiCaprio ha colaborado con grandes directores a lo largo de su carrera, especialmente con Martin Scorsese, con el que ha trabajado en seis ocasiones: Shutter Island (2010), El lobo de Wall Street (2013) o la más reciente, Killers of the flower moon (2023), son algunos ejemplos.
Christopher Nolan contó con él en la aclamada Origen (2010), donde se preguntaba si la realidad en la que vivía era un sueño dentro de un sueño, y Quentin Tarantino le reclutó en Django desencadenado (2012), donde su compromiso con el personaje era tal que siguió actuando en una de las escenas a pesar de un gran corte en la mano.
El Oscar se hizo esperar, pero finalmente consiguió hacerse con la estatuilla en 2016 gracias a El renacido (2015), y usó su discurso de aceptación como altavoz para reivindicar la lucha contra el cambio climático y la protección de las poblaciones indígenas.
El actor tiene una larga trayectoria de compromiso con esta causa en varias asociaciones, a través de la financiación y la concienciación sobre la protección de la biodiversidad, la conservación de los océanos y los bosques.
