>El libro fue dado a conocer en el Museo Guillermo Ceniceros.
La Voz de Durango
Con palabras de bienvenida de Francisco Javier Pérez Mesa, Director General del Instituto de Cultura del Estado de Durango (ICED), se presentó el libro “Lealtad al fantasma” de Enrique Serna, en el Museo de Arte Moderno Guillermo Ceniceros, dentro de las actividades del Festival Revueltas 2024.
El maestro Everardo Ramírez Puentes fue el encargado de presentar dicha obra en la que dio detalles de la misma: “Lealtad al fantasma, en primer lugar, admito que no es un texto sobrio, ni aburrido, sino alegre, divertido, dicharachero, insolente y eficaz, que lo mismo se puede leer en una biblioteca o en un bar, que puede leerse sentado o de pie, pero es más recomendable leerlo acostado por aquello de las dudas, que es preferible leerlo con lápiz para destacar metáforas como: “la soledad es una especie de roña o había nacido para relámpagos” y qué más prudente afirmando una de las formas ideales para preservar el humor y frente a la virtud y la solemnidad domesticada.”
Por su parte, Enrique Serna manifestó su gusto por regresar a Durango, sobre todo al Festival que lleva el nombre de la familia Revueltas. Se declaró gran admirador de José Revueltas a quien ha seguido con pasión y a quien la ha dedicado un ensayo que desea publicar próximamente.
Muy ameno en su charla, compartió cómo desde su adolescencia escribe cuento, como los aprendizajes de la vida y el ser lector le han enriquecido su trabajo, como le interesaba el humor cruel, el humor ácido como expresión de inconformidad, “la literatura se nutre de vivencias y experiencias literarias…”.
Dio detalles sobre Lealtad al fantasma: “lo que le da unidad al texto es el tema de la pérdida del libre albedrío, los personajes le ceden el timón de su destino a seres que están por encima de ellos, porque tiene flaca la voluntad, por que se han enamorado algo que hace muy vulnerable a cualquier persona” compartió.
En el segmento que se abre para preguntas del público, el entusiasmo por participar no se hizo esperar, los lectores no escatimaron en elogios sobre sus textos favoritos incluso los citaron y el autor se mostró muy complacido al ofrecer sus respuestas.