>La agrupación de virtuosos músicos duranguenses interpretaron el disco Picnic Suite del compositor francés Claude Bolling.
Por Juan José Nava / La Voz de Durango
Con una excelente anfitrionía que incluyó música selecta, un ambiente elegante y un nutrido público, el Instituto de Bellas Artes de la Universidad Juárez del Estado de Durango (IBA-UJED) celebró en concierto sus primeros ocho años de trayectoria en la ciudad de Durango, como un espacio dedicado a la formación de los profesionales en los ámbitos de la creación, producción, difusión y del proceso creativo.
El evento fue organizado por el titular de dicho espacio, Francisco Arroyo Chairez, quien hizo una extensa invitación a catedráticos, maestros y funcionarios de la UJED, así como a agentes del sector público entre los que se encontraron empresarios, medios de comunicación y personalidades del ámbito tanto académico como científico de la localidad, para ser partícipes de una generosa contribución a beneficio de las acciones de planeación de la Orquesta de Cámara adscrita al mismo instituto, la cual se abrevia con las siglas OCUJED.
Para la ocasión, se contó con la presencia del Quinteto de Jazz del IBA-UJED, conformado por virtuosos de la música, maestros y alumnos de la Escuela Superior de Música, que tuvieron a bien, agasajar con su talento al público presente con el álbum titulado “Picnic Suite” del pianista, compositor, arreglista y actor francés, Claude Bolling (1930-2020).
Fueron 7 piezas en total las que se interpretaron durante la noche, entre ellas, “Rococo”, “Gaylancholic”, “Madrigal”, “Canon”, “Tendre”, “Fantastique” y “Badine”, mismas que fueron recibidas con total agrado y ovacionadas en cada intervención.
Los músicos que participaron con su arte fueron dirigidos por el maestro y pianista Miguel Ángel Burciaga, quien también participó en dicho evento, además de Malena Gustín (flauta transversal), Yander Amín Rodríguez (guitarra clásica), Anahí Villarreal (contrabajo) y Samuel Aguilar Mejía (baterista).
La participación musical tuvo una duración aproximada de 40 minutos, mientras que, al finalizar, como un gesto de agradecimiento, los espectadores recibieron una variedad de aperitivos y bandejas surtidas de alimentos acompañadas de bebidas con la intención de disfrutar de la velada a modo de reunión social para compartir opiniones, mientras los músicos y personal del IBA-UJED iban de mesa en mesa saludando a su auditorio y agradeciendo por la asistencia.
