>Paolo Macchiarini realizó trasplantes de tráquea sintética en 9 pacientes; solo dos sobrevivieron.
>Te contamos lo que hay detrás de la historia real de la serie de Netflix.
Agencias
La serie documental de Netflix, que relata la polémica carrera del doctor Paolo Macchiarini, ha capturado la atención de la audiencia desde su estreno el 29 de noviembre.
La obra del director Ben Steele, dividida en tres episodios, explora las experiencias de las víctimas de Macchiarini, un cirujano acusado de mala praxis, y cómo su reputación pasó de ser la de un innovador médico a la de un estafador.
«El cirujano Paolo Macchiarini es famoso por sus revolucionarios trasplantes de tráquea con células madre. Pero hay un problema: sus pacientes no sobreviven», reza la sinopsis de la plataforma.
LA SINIESTRA HISTORIA REAL
El centro de la controversia se encuentra en el procedimiento pionero de Macchiarini: el trasplante de tráqueas sintéticas utilizando células madre del paciente.
Andemariam Beyene, un estudiante de Eritrea residente en Islandia, fue el primer paciente en recibir este tratamiento en 2011. Macchiarini lo convenció de que era su única esperanza de supervivencia, según lo consigna ‘BBC’. Este procedimiento representó un hito en la medicina regenerativa, pero con el tiempo surgieron dudas sobre la validez y seguridad de sus prácticas.
“Podría ser un impostor, pero también podría ser un genio”, es una de las frases que se incluyó en la docuserie recién estrenada en Netflix que narra su caso. ‘El gran cirujano del engaño’ (Bad surgeon: Love under the knife) se consagró como un gran éxito en el ‘streaming’.
Paolo Macchiarini nació en Suiza y vivió su infancia en Basilea. Posteriormente, estudió Medicina en la Universidad de Pisa, se especializó en cirugía torácica en la Universidad de Alabama de Birmingham y realizó un doctorado en Francia. También trabajó en el Instituto de Investigaciones Biomédicas de Barcelona, en España.
El cirujano realizó trasplantes de tráquea sintética en nueve pacientes, incluyendo a Claudia Castillo, Hannah Warren, Yesim Cetir, Keziah Shorten, Christopher Lyles, Yulia Tuulik y Alexander Zozulya. A pesar de sus promesas iniciales, la mayoría de estos pacientes fallecieron (solo sobrevivieron dos) lo que llevó a un escrutinio más profundo de su trabajo.
Macchiarini presumía estar en contacto con personas como Barack Obama, Bill y Hillary Clinton, y el emperador Akihito de Japón. Su vida personal también llamó la atención, especialmente su relación con la periodista de ‘NBC News’ Benita Alexander, a quien prometió una boda lujosa con invitados famosos, como Vladimir Putin o Nicolás Sarkozy, y oficiada por el papa Francisco.
En 2019, Macchiarini fue condenado por falsificación de documentos en Italia, aunque posteriormente fue absuelto. No obstante, en 2022 fue condenado por causar lesiones corporales a un paciente, y en 2023, el Tribunal de Apelaciones de Estocolmo lo sentenció a dos años y medio de prisión por agresión grave contra tres pacientes. Sus intentos de apelación fueron rechazados, con la última negativa del Tribunal Supremo en octubre de 2023.