- Alimenta diariamente el Comedor Comunitario “Octavio Paz” a 32 niños con un menú de alto valor nutrimental.
- Hay más familias felices y tranquilas.
Durango, Dgo.
“Que Toño Ochoa brinde alimento diariamente en los comedores comunitarios cambia la vida de las familias en automático”, expresó Esperanza Alvarado Santillán, encargada del Comedor Octavio Paz, donde 32 niños y sus papás almuerzan y comen.
Hay un gran impacto en la población, afirmó, ya que a diario ve familias más contentas y fuertes. “La gente viene con todas las ganas de comer, luego dicen ya comimos y nos vamos felices a la escuela o a trabajar”, relató.
Ella lleva 17 años trabajando en el DIF, pero ante el beneficio generado con los comedores comunitarios, considera que esta labor es la “más bonita” que ha realizado y por lo tanto la que más orgullo le causa.
De hecho, dijo, hay cinco familias en espera de ser incluidas, para el que no se requiere nada más que solicitarlo, y no dudó que con el impulso que Toño Ochoa da a la eliminación de la pobreza alimentaria, pronto formen pronto parte del comedor.
“Nutriendo Almas” es una realidad pues “hay niños que aquí conocieron algunas frutas y verduras, las madres de familia manifiestan que ya están tranquilas por tener alimento seguro para sus hijos”, recalcó.