- La mayoría de estas empresas ofrecen productos de mala calidad, sin las normas de salud necesarias.
César Rodríguez / La Voz de Durango
Entre condiciones insalubres y evasión de impuestos prospera el negocio de las tortillerías informales alentada por la nula regulación de los tres niveles de Gobierno, donde los establecimientos formales son los principales perjudicados, señaló el presidente de los Industriales de la Masa y la Tortilla, Antonio de la Torre Carlos.
En tal sentido, precisó que este año la informalidad ha alcanzado el 30 por ciento en la entidad, misma que se puede extender para los próximos meses al no tomar cartas en el asunto.
Concretamente, indicó que en la ciudad capital la tortilla oscila entre los 22 a 24 pesos por kilo, mientras que las tortillerías informales llegan a ofrecer hasta en ocho pesos el kilo, por lo que la calidad en su elaboración no está garantizada.
Asimismo, indicó que los locales bien establecidos pagan impuestos, nóminas y servicios, mientras que la informalidad no puede garantizar el origen de sus insumos.
En ese tenor, aseveró que los tortilleros exigen piso parejo, ya que algunas misceláneas venden el producto como si fuera de buena calidad, con el objetivo de incrementar sus ganancias.