La orquesta llevó a cabo un homenaje a Mozart.
Por Juan José Nava / La Voz de Durango
La Orquesta de Cámara de la Universidad Juárez del Estado de Durango (OCUJED) presentó su segundo concierto de temporada 2023 que llevó por título “El Balance Perfecto” en homenaje a una de las figuras más enigmáticas y brillantes de toda la historia del arte, Wolfgang Amadeus Mozart.
El Instituto de Bellas Artes de la máxima casa de estudios (IBA-UJED) fue la sede de dicho evento que lució lleno total en todas sus localidades.
De acuerdo con Miguel Ángel Burciaga, director de la OCUJED, el título del concierto alude a la particularidad de que la música del laureado compositor es extremadamente equilibrada en la audición, a tal grado que es comprensible más difícil de imitar, he ahí su grado de brillantez y originalidad.
“Gran parte del público cree que esto se debe a su talento e inteligencia desarrollados desde una edad muy temprana, pero en realidad, esto no alcanza para trascender como lo ha hecho este personaje, ya que niños prodigio hubo muchos, pero, casi ninguno perdura a través de los siglos como Wolfgang Amadeus Mozart””.
“Una de las razones a las que se le adjudica este calificativo, es el balance del genio de Salzburgo. Al igual que cualquier otra expresión artística, la música se construye amalgamando diversos elementos que deben mantener una armonía en la manera que interactúan. Por ejemplo, la duración de un primer tema debe tener una relación de proporción a la de un segundo tema, porque aún para un oído inexperto, las partes no corresponderían y produciría quiebres constantes en la apreciación del discurso”, explica.
En cuanto al repertorio se refiere, las primeras piezas presentadas fueron “Obertura de La Fintas Giardiniera” y el Concierto No.5 para violín y orquesta”, donde se destacó la participación del solista invitado Luis David Aguirre Valenciana.
Luego prosiguió la “Sinfonía No.29 en La Mayor”, considerada una de las mejores obras que escribió Mozart para el género orquestal aún comparada con sus últimas sinfonías.
“La música de Mozart tiene la particularidad de ser siempre extremadamente equilibrada en la audición, pero cuando algún especialista se acerca a las partituras de este compositor, las pruebas de este balance no son tan claras como en la percepción y denotan una complejidad en la elaboración de los elementos compositivos, que es prácticamente imposible de imitar, siendo hasta el día de hoy imposible dominar desde el ejercicio compositivo las técnicas mozartianas, es decir, podemos comprenderlas, pero muy difícilmente, imitarlas”, concluyó Miguel Ángel Burciaga.