- Se agota el vital líquido.
- La sequía del 2022 impactó directamente en la producción agrícola del estado, zona sierra la más afectada.
César Rodríguez/ La Voz de Durango
El 2022 fue un año atípico para el campo duranguense, donde las condiciones de sequía e inundación impactaron de manera directa a la producción agrícola.
A decir del regidor y exdirigente de la Confederación Nacional Campesina (CNC) en Durango, Pedro Silerio García, señaló que actualmente el agua de los bordos de abrevadero se está agotando, lo que pone en riesgo las cabezas de ganado.
Asimismo, precisó que los productores presentan una grave crisis financiera, y es que la falta de apoyo por parte del Gobierno federal, aunado a los bajos precios de venta, impactaron directamente en su bolsillo.
De tal manera, manifestó que cosechas enteras se perdieron por las intensas lluvias que se presentaron a mediados del año pasado, donde poblados como El Arenal, perdieron la totalidad de su siembra.
En ese sentido, la zona alta de la sierra fue la más afectada, y es que las heladas tempraneras terminaron con el ciclo agrícola de algunos alimentos.
Finalmente, hizo hincapié que mientras la federación no le de la importancia al campo duranguense, las condiciones de vida del productor no van a mejorar.