Por Omar García Rosales
En el cine una sola secuencia vale para darle toda la autoridad y grandeza a una cinta y convertirla en eterna. Estrenada en 1972 la película de The Godfather (El Padrino) no necesita mayor presentación ya que es una cinta que ha marcado un antes y después en la historia del séptimo arte.
Basada en la obra homónima de Mario Puzo y bajo la dirección de Francis Ford Coppola, la cinta nos transportaal verano de 1945, fecha en que las grandes familias sicilianas eran quienes dominaban las calles de los Estados Unidos mediante amenazas, sobornos y violencia, pero de entre toda esta mafia, destaca Don Vito Corleone (Marlon Brando), un gran líder y jefe de una de las cinco familias quetienen el control de una parte de Nueva York, el cual valora más la amistad, la lealtad y por sobre todas cosas a la familia, que al dinero. Además de que tiene un gran código de honor y no se encuentra del todo convencido de que los italianos deban de entrar en el tráfico de drogas, cosa que ha causado un gran descontento entre otras familias del hampa, quienes planear asesinarlo para reclamar la plaza como suya.
A pesar de haber recibido varios disparos letales, Vito Corleone logra sobrevivir y decide que su hijo mayor Sonny(James Caan) se haga responsable de los negocios de la familia, intentando alejar lo más posible a su hijo menor Michael (Al Pacino) de la mafia y lo que esto conlleva, después de que cobrará venganza por quienes atentaron contra su padre. Mientras que el carácter de Michael es más tranquilo y calculador, Sonny es más temperamental y explosivo, cosa que desencadenaría en su muerte obligando a Michael a elegir entre los deseos de su padre y la realidad sobre lo que significa ser un Corleone.
La película llegó en un momento decisivo del cine, ya que la mayoría de las cintas de esa época se encontraban dedicadas el género Western que venía en decaída, por lo que uno de los grandes aciertos de la Paramount Pictures, fue el de apostar por la historia literaria de Mario Puzo sobre la mafia para posteriormente filmarla. Tras barajarse muchos posibles candidatos a filmar el éxito de Puzo, los productores optaron por Francis Ford Coppola, quien desde el principio estuvo en conflicto con los productores, quienes al final aceptaron su visión, elenco, historia y forma de hacer cine, quien nos presentó una de las mejores películas en la historia del cine.
A medio siglo de vida de haberse estrenado en cines, El Padrino no pierde actualidad y sigue siendo listada como una de las mejores películas de la historia. En cada revisiónse descubren nuevos matices, nuevas miradas, sombras o sonidos de una de las películas más redondas de la historia, una oferta a los que pocos pueden rehusarse.