- En Durango, de los caros del país.
- Es horrible para las fonditas y desayunadores el momento en que deben rellenar sus tanques de gas.
Alejandro Valencia / La Voz de Durango
Durante los últimos meses el precio del gas Lp en el estado de Durango ha sido un tema de debate en todos los sectores como es el social y el económico, ya que al ser uno de los más altos en el país sea considerado como un insumo indispensable, pero muy difícil de sostener.
Específicamente para el sector comercial con son las fonditas o desayunadores, señalan que son quienes más sufren el incremento de precio del gas, sobre todo porque cada mes deben rellenar sus tanques hasta tres veces.
Linda García Castro, desde hace 15 años es dueña del desayunador “Las Berolas” y aseguró que por el alto precio del gas Lp así, como de la carne y verduras es horrible sostener su negocio, pues cada 20 días invierte mil pesos para seguir trabajando.
“Ya ve uno que se le va a terminar el gas y hasta tiembla porque hay que comprarlo, por ejemplo, se acaba este y el de la otra estufa y se convierte en un gasto que uno no sabe qué hacer”, explicó.
Por tal motivo ha tomado la decisión de incrementar el precio de sus platillos debido a la incertidumbre de cómo estará el precio del gas a la quincena siguiente.
La fondita denominada “La Esquinita” es atendida por Petra Limones, esta mujer trabajadora confirmó que el gas es un producto básico no solo para su comercio sino para su hogar y eso implica un doble gasto.
Por tal motivo dijo que al ser insumo sin tarifa fija, deben subir los precios de sus platillos, no obstante, la piensa dos veces ya que está consciente de que la economía de los duranguenses no ha mejorado.
“Se detiene uno en el aumento y es pérdida para el negocio, de ahí que vengan muchas bajas o a veces cierres de pequeños negocios, aparte para la familia es un producto que debe tener un precio, no puede estar de arriba hacia abajo, nos bajan un peso y nos suben 10 pesos o mes”, comentó.
Finalmente, hay negocios que van empezando como el de Víctor Rodríguez, al que nombró “El Caldero Antojitos”, este emprendedor a unos pocos meses de haber iniciado ya ha tenido que cambiar dos veces su tanque de gas y con ello comprendió que es la materia prima de más valor y de mayor costo.
En ese sentido al conocer lo que cuesta tener un negocio de comida se ha puesto creativo y para ahorrarse unos pesos muy valiosos él mismo acude a la gasera para llenar su tanque.
De acuerdo con la Comisión Reguladora de Energía (CRE) en Durango se vende a 24.74 pesos por kilogramo y 13.36 pesos el litro de gas.
