La compañía Danzarena proveniente de Chihuahua, se presentó en el CORE el pasado fin de semana.
Por Juan José Nava / La Voz de Durango
Como parte del Circuito Nacional de Artes Escénicas en Espacios Independientes en el marco del Proyecto Chapultepec, Naturaleza y Cultura, de la Secretaría de Cultura, la compañía artística de origen chihuahuense Danzarena, presentó el espectáculo «Cuerpo Memoria», mismo que tomó como sede el escenario del Centro Revueltas A.C. (CORE) durante el pasado fin de semana.

La exploración de la memoria individual y colectiva de los cuerpos, a través de los recuerdos y las historias que se han ido entretejiendo a lo largo de nuestras vidas, desde la infancia hasta la etapa adulta, forman parte del recorrido de este espectáculo de danza, el cual nace de los confines de la pandemia para desentrañar de forma intuitiva, el lenguaje del cuerpo en sus múltiples manifestaciones experienciales, tratando de entender la fuerza política que existe inherente en torno a su contacto con los demás seres humanos y la misma naturaleza.

Con las apariciones en el escenario de Andrea Almora, Tania Núñez y Cynthia Aguirre, quien además funge como directora y coreógrafa de la compañía, y, en cuanto a la creatividad musico-poético se refiere, la presencia de Boris Díaz, la compañía Danzarena hizo una representación de los procesos que ha creado la danza a través de «rutas que investigan y desdibujan las fronteras de la estética del cuerpo y el virtuosismo dancístico».

La obra que empezó a cristalizarse en 2020, durante 45 minutos a través del extenso lenguaje interpretativo de la danza contemporánea y que se prolonga más allá de la intención discursiva del proyecto hacia la interpretación libre del espectador, genera algunos cuestionamientos como: ¿Dónde guardamos la memoria que habita nuestros cuerpos?, ¿Cuánto hemos caminado juntos a los otros que habitan los mismos lugares dentro de la ciudad o la naturaleza?.

“La danza contemporánea es una forma de expresión más libre, donde damos más oportunidad a los cuerpos, este trabajo encierra esa interrogante de cómo nuestros cuerpos reaccionan y se mueven con el detonante de la memoria”, describió Cynthia Aguirre, aseverando la gratitud que trae consigo el cuerpo como un conecte entre espíritu y alma, imposible de engañar, ya que siente y tiene la capacidad de sanarse.