Opinión: Yo Campesino / País del crimen

0
237
  • Ganso da empresota a militares por abrazos al crimen en tanto el país se desangra.

Miguel A. Rocha Valencia

Barato entregaron el honor y compromiso de defender al pueblo militares y marinos; les “untaron” dinero, concesiones y poder a cambio de su “lealtad” y ser cómplices de la masacre que vivimos los mexicanos.

Tal vez también les estén pagando su traición al entregar la patria a un autócrata que sigue los pasos de otros bananeros que se apropiaron de países como Venezuela, Cuba y Nicaragua.

Según la historia eso se paga tarde o temprano, aunque mientras las masacres y ejecuciones selectivas, incluso de policías, se generalizan y se vuelven noticia internacional.

En menos de tres meses, la impunidad de que gozan criminales mientras los militares cuentan sus monedas de plata y reparten abrazos en los cuarteles, los asesinatos crecieron y ya rebasan los 103 mil 450, de acuerdo al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública y la sobretasa de defunciones reportada por el INEGI.

Y lo peor es que la impunidad de que disfrutan los cárteles, no sólo cobra vidas sino también cuotas políticas con alcaldías, gubernaturas y congresos, donde su mano impone la entrega de contratos para lavar dinero, protección en ínsulas para los “jefes”, la nula persecución de delitos federales o del fuero común y desde luego, el sojuzgamiento de regiones enteras de diversos estados.

Según el mismo SESNSP, los estados con mayor violencia están gobernados por Morena en sus dos niveles, aunque por el número de asesinatos están Baja California, Sonora, Sinaloa, Michoacán, Nayarit, Colima, Jalisco, Estado de México, Coahuila, Veracruz, Oaxaca, Guerrero, Jalisco, Guanajuato y Quintana Roo, vuelve a cobrar notoriedad.

Este último estado, donde se sabe el crimen tiene “renteado” a todo mundo, se volvió noticia luego de que a plena luz de día y sin importar vigilancia, comandos armados descaradamente se disputaron la distribución de drogas en dos hoteles “gran turismo” y ante visitantes nacionales y extranjeros, se balacearon. Dos fueron ejecutados. Desde luego, no hay detenidos.

Días antes, con entera impunidad y en una acción similar a la ocurrida en marzo en Tonalá, Jalisco, el día 4 de este mes, en Tangamandapio, tenencia de Tarecuato, Michoacán, fueron ejecutadas 11 personas, entre ellos cinco adolescentes. Lo bueno es que no hay masacres.

Ahí la disputa es entre Cártel Jalisco Nueva Generación y los llamados Cárteles Unidos. Entre ambos, mantienen a esa región bajo el terror. Los habitantes deben pedir permiso a los delincuentes para salir o entrar, o como en Nuevo León y Metepec, Estado de México para organizar eventos que les prohíben abiertamente con una ejecución o manta en lugar visible. En este último municipio donde viven políticos de alto nivel, a unos pasos de Toluca, se canceló la feria. Así de poderoso está el crimen.

La más reciente masacre, en la capital de San Luis Potosí. Un comando ingresó la madrugada del viernes pasado a una precaria vivienda y ejecutó a tres hombres y a una mujer menor de edad.

En tanto los soldados, se mantienen en sus cuarteles y ni siquiera responden a las agresiones directas. La Guardia Nacional, no existe, anda correteando indocumentados. Entonces ¿Para qué más instalaciones militares? Esto será tema de otro comentario.

Claro que los militares verdes y blancos se quedan quietos si a cada paso el Ganso les otorga nuevas canonjías, concesiones, dinero por miles de millones, contratos opacos y ahora la administración de empresotas, dizque para que no se corrompan ni se privaticen, a sabiendas que en los cuerpos castrenses existe la corrupción hasta para el “rancho”, uniformes, jabón de baño y pasta de dientes.

Apenas el machuchón les dijo a los verdes que les deja no sólo la construcción o remodelación del aeropuerto como Santa Lucía, o el Tren Maya en Tulum, Palenque y Chetumal, sino también la administración dizque para pagar de ahí sus pensiones, cosa que aplaudió como foca el titular de Fonatur, Rogelio Jiménez Pons.

De nada sirvió que se indignara el titular de la SCT, el anciano millonario y sinvergüenza lacayo Jorge Arganis, bajó la cabeza y dijo “si amo”. Antes, por la entrega de las aduanas y la marina mercante a los “blancos” renunció su antecesor Javier Jiménez Espriú.

¿Así de barato entregarán los mílites el país a un sujeto casi iletrado, vengativo y político enano llegado de Macuspana, que además es corruptazo (a la mejor por eso) tanto que el World Justice Project nos colocó ¡peor que Venezuela y Haití! Esos países están en los lugares 129 y 130 y México en el 135 de 139…

Por Mi Raza Hablará el Espíritu.