Ve-lez vida y nutrición

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Por: Andrea Vélez Ríos

Hola ¿Cómo están mis estimados lectores? Ya estamos por terminar el mes de agosto, ¿Cómo se encuentran? Deseo que bien con salud y todo. En esta ocasión abordaremos un tema que nos ha venido preocupando y que padecen muchas personas y me refiero a la ansiedad.

La ansiedad se caracteriza por la preocupación excesiva ante situaciones de la vida cotidiana como: familia, responsabilidades, laborales o económicas, la salud. Sobre todo, cuando esas sensaciones de preocupación ya no te dejarán realizar tu vida como cotidianamente lo haces es importante ir con un psicólogo para que no se convierta en un trastorno. Y si es una preocupación muchas veces anticipada de cosas que aún no pasan. Cuando tenemos más de 1 de síntomas se consideraría ya ansiedad.

-Reacciones físicas:

-Dolor y malestar físico

-Inquietud

-Problemas digestivos

-Problemas sociales

-Fatiga

-Tensión muscular

-Descontrol de peso

-Cambios de humor

-También perdida del lívido (deseo sexual)

Algunas de las causas de tener problemas de ansiedad es estrés laboral, preocupaciones familiares, comer con poco tiempo (en menos de 15 minutos), picos elevados de insulina, dificultad en el control de peso (comer alimentos ricos en calorías, grasas y azúcares), alteraciones hormonales.

Tratamiento para control de ansiedad, en los casos importante en los que la ansiedad por comer se ha convertido en un trastorno alimentario como tal, el tratamiento consiste en acudir con un psicólogo para una terapia y evaluar qué nivel de ansiedad manejas, ir con el nutriólogo para control de peso, cambios alimenticios

Consejos que te damos la psicóloga Lupita Sandoval y una servidora es respira despacio. Antes de empezar a comer, respira profundo varias veces para relajarte y tomar conciencia. Evita distracciones como el celular y televisión. Tomate tu tiempo para comer. Tus comidas deben de ser de 30 minutos para que mastiques correctamente. Evita la cafeína y el azúcar refinado. Excitan tu cerebro y aumenta los nervios.

Comer en menor cantidad. Realiza tus tiempos de comida como te los pone tu nutriólogo, así evitarás picos de hambre y mantendrán a tu metabolismo activó. Agrega alimentos que contengan Omega 3 y grupos de vitaminas B como son pescados azules, frutos secos, cereales integrales, semillas (ayuda a reducir la ansiedad). Alimentos contra la ansiedad. Promueven una sensación de bienestar y favorece el sueño. Leche, quesos, plátanos, piña, pechuga de pollo o pavo, frutos secos

No te saltes las comidas. Solo conseguirás comer compulsivamente en la siguiente porque tendrás más hambre. Jamás salgas de casa sin desayunar y cena temprano. Bebé muchos líquidos. Al menos dos litros de agua diarios, te tranquiliza y muchas veces la sed se confunde con hambre. Elimina la ansiedad y el estrés acumulado. Práctica algún ejercicio regular, técnicas que ayuden a controlar cuerpo y mente.

Para más información puedes contactarnos Guadalupe Sandoval al 6182069421 y Andrea Vélez al 6181202520 en Hüman Kinetics de 9:00 a 11:00 horas y de 16:00 a 19:00 horas.