Por: María Itzel Guereca Meza
Hola, ¿Cómo están estimados lectores que me acompañan semana a semana? En un mundo tan globalizado como el nuestro, en medio de rutinas extenuantes, jornadas de trabajo de 8 a 14 horas diarias, con la idea en la mente de que el éxito consiste en cuánto trabajo diario puedes soportar, con todo esto hemos olvidado lo importante que es para nuestro cuerpo el poder descansar correctamente. El siglo XXI ha estado catalogado por enfermedades como el estrés, la diabetes, la depresión, la obesidad, solo por mencionar algunas. Y muchas de estas son consecuencia del ritmo de vida que lleva cada persona, desde pocas horas de sueño, una deficiente alimentación, el excesivo estrés laboral y demás factores que influyen de forma directa o indirecta en nuestro estado de salud.
El descanso es un periodo de baja actividad física en el que le permitimos a nuestro cuerpo recuperar un ritmo metabólico adecuado para la regeneración de tejidos, reabastecer cargas energéticas, hacer involuntarias funciones vitales como la respiración y la contracción muscular, de forma que los sistemas encargados de estas puedan también relajarse un poco.
Descansar tiene un sinfín de beneficios que sabiendo utilizarlos a nuestro favor, podemos aprovecharlos dentro de nuestras horas activas en el día. Un buen descanso ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, mejora la concentración, estimula la capacidad cognitiva, permite que nuestro sistema se alerta se desactive, reduce la carga en articulaciones, reduce el agotamiento mental, y sobre todo, nos permite darnos cuenta que la vida y el éxito van mucho más allá de nuestro trabajo, y que si bien es muy reconfortante ser productivos, igualmente lo es tomar un respiro de las responsabilidades diarias.
Y para un correcto descanso se recomienda jornadas de trabajo con pausas de 15 minutos por cada 45 minutos activos, dormir correctamente preferiblemente de noche, un mínimo de 6 a 8 horas diarias, consumir en la menor cantidad posible de alimentos procesados o comida rápida, incorporar a la rutina diaria actividades “de fuga” entiéndase como, alguna actividad que no tenga que ver con nuestro trabajo, que sea divertida y relajante para nosotros como leer, escuchar música, hablar con amigos y familia, hacer deporte o cualquier otra.
Dale un respiro a tu cuerpo. Para dudas, valoraciones o tratamientos, me encuentro a tus ordenes en Hüman Kinetic´s o al teléfono 6181588892.
