Por Ma. de la Luz Gutiérrez Simental
Son propiedad de las mujeres el 36.6 % de las mipymes en el país; pero solo generan el 15.2% del valor agregado censal bruto ya que el 99.5% son micro negocios; si a esto le sumamos que el 78.4% de estos micro negocios son informales, encontramos un panorama muy retador, aparece un largo camino por recorrer, sobre todo en términos de productividad.
Las empresas lideradas por mujeres, emplean al 24.7% del total del personal ocupado, contando cada empresa en promedio con 2 empleados como máximo, puestos que son ocupados por mujeres ya que sus propietarias prefieren que sus colaboradoras sean mujeres, esto demuestra el apoyo que nos brindamos unas a otras.
Con respecto a las opciones de crecimiento y consolidación de las empresas, solo 13 de cada 100 mujeres empresarias y emprendedoras, obtuvieron financiamiento. Sin embargo, es importante señalar, que de cada 100 mujeres que obtuvieron un préstamo para invertir en su empresa, el 99% salda sus deudas de manera íntegra. (Secretaría de Hacienda y Crédito Público, 2013)
Las mujeres de empresa, establecen como su prioridad para el uso de sus ganancias, el gasto familiar. Ya que una vez que se generan utilidades; ellas destinan más del 70% en su familia; los hombres solo entre 30 y 40%. (Ammje,2013)
¿Cuanto vale el trabajo doméstico en pesos constantes y sonantes?
Tanto hombres, como mujeres hemos considerado el trabajo doméstico y los cuidados como una labor poco importante dentro de la dinámica económica, familiar y social. Alguna vez, al encontrarnos con una amiga le preguntamos ¿dónde trabajas? Y su respuesta es: no trabajo, me dedico a la casa. ¡Nosotras mismas hemos devaluado nuestra contribución en el hogar! Sabemos del enorme esfuerzo físico, emocional y psicólogo que implica ese “me dedico a la casa”.
En México, el 76.3 % del trabajo doméstico y cuidados no remunerados en el hogar los realiza una mujer, este trabajo no remunerado tiene un valor de mercado en promedio de 5 mil 190 pesos mensuales, lo que representa un ahorro anual en el gasto familiar de 62 mil 280 pesos. (Inegi 2021). Adicionalmente, de acuerdo a la cuenta satélite del trabajo no remunerado de los hogares en México 2019, este trabajo representa el 22.3% del PIB, un monto muy significativo.
Si además del trabajo doméstico, cuentas con un empleo fuera de casa, estas aportando doble ingreso a tu familia, uno a través del ahorro “del empleo doméstico” y dos, el directo del empleo formal. Sería interesante que le sumes a tus aportaciones a la familia, esos 5190 pesos mensuales adicionales.
Finalmente es importante destacar el Informe del Banco Mundial (2011) donde establece que la productividad de nuestro país, podría aumentar hasta un 25% si las barreras discriminatorias contra las mujeres desaparecieran. Necesitamos un terreno mas parejo para el emprendimiento femenino, pero mientras esto sucede; te exhorto a ti mujer emprendedora y mujer empresaria, a prepararte más que nunca; las herramientas para el crecimiento y consolidación de nuestras empresas se están generando día a día.
Lo que era útil hace 1 o 2 años; ya no funciona. Las necesidades, las plataformas, los productos, el mercadeo; cambian con tal rapidez que sentimos que nos han rebasado.
La formación, la flexibilidad e innovación, son las herramientas que nos permitirán adaptar nuestras empresas a esta nueva realidad. ¡Nada es imposible para una mujer!