Graciela Rosales/La Voz de Durango
Más de medio millón de mexicanos ha muerto a consecuencia del coronavirus, ¿Cómo es posible entonces que haya quienes dudan que exista el Covid-19?, en Durango el número de muertos casi llega a cuatrocientos y los contagios superan las 4 mil 700 personas; a nivel nacional se han perdido más de un millón de empleos y en Durango alrededor de 9 mil. ¿Qué estamos esperando para disminuir la movilidad y acatar las medidas sanitarias?, ¡asumamos la responsabilidad ciudadana!
Las respuestas son muchas, van desde la incredulidad del virus, los que se sienten inmunes por el consumo de productos milagro; pero la mayoría habla de la desconfianza que generan autoridades en el manejo de la pandemia y las consecuencias económicas que genera el confinamiento.
Para muchos es difícil entender cómo desde el gobierno federal, al inicio de la pandemia, se establecieron lineamientos generales a los que estaban sometidos todos los estados de la república mexicana; se nos hizo creer que el confinamiento adelantado, es decir cuando había apenas unos cuantos casos, ayudaría a evitar contagios y fallecimientos.
Y aunque la movilidad se detuvo a medias, hubo más obediencia ciudadana que la que hay ahora con muchos más contagios y muertes, es más, la movilidad de los duranguenses ha ocupado en varios días, el primer lugar a nivel nacional.
Y es que cuesta trabajo entender la gravedad del problema cuando el gobierno federal no ha dado la atención que se merece el tema; se distribuyeron apoyos en material y equipo que no fueron suficientes, pero no hubo recursos adicionales para que las entidades hicieran frente a un problema extraordinario.
La economía se contrae peligrosamente en todo el país, y el gobierno federal no apoya más allá de las becas para adultos mayores, personas con discapacidad y becas estudiantiles; pero no impulsa a las pequeñas y medianas empresas que han hecho esfuerzos valiosos para conservar sus plantillas laborales, pese a las cargas fiscales que deben cumplir.
Al gobierno federal se le olvidó que esas empresas generan el 80 por ciento de los empleos en el país y ahora tenemos más de un millón de desempleados en México y aquí en Durango, las últimas cifras del IMSS dicen que se han perdido más de 9 mil empleos.
¿No es momento de ponernos las pilas?, yo creo que sí, que vamos tarde para asumir la responsabilidad que nos toca como ciudadanos, yo no quiero esperar a que alguien de mi familia, mis amigos o compañeros se mueran de Covid-19, para entender.
Yo no quiero a esperar a que sigan cerrando las empresas y el número de desempleados crezca hasta poner en riesgo la seguridad pública, con actos vandálicos o delictivos que compliquen aún más el panorama.
Por favor, hagamos lo que nos corresponde para sumarnos al esfuerzo de las autoridades estatales, para solidarizarnos con el sector salud, que valga de algo el cierre de tanta empresa y el sufrimiento de los que se quedaron sin ingresos; en nuestras manos está, de nosotros depende la salud, la vida y el crecimiento económico de la entidad.