Por Omar García Rosales
La década de los años 80’s y su influencia en la cultura con el pasar del tiempo, sigue dando de qué hablar gracias a diferentes historias que se convirtieron en un claro reflejo de la sociedad. Y desde hace 35 años la cinta “El Club de los cinco” (The Breakfast Club) sigue reflejando la situación de los jóvenes hoy en día.
Dirigida por John Hughes en 1985, El Club de los Cinco nos presenta cómo un simple sábado cualquiera en la biblioteca de la escuela, se convirtió en toda una revelación para un grupo de cinco jóvenes quienes han sido castigados por distintos motivos. Estos cinco jóvenes constituyen el reflejo perfecto de los estudiantes que podemos ver hoy en día; John Bender, el “chico malo de la escuela”, quien pasa más tiempo fumando y bebiendo con sus amigos que estudiando; Claire Standish, la “princesa” y la chica más popular de la escuela; Andrew Clark, el “atleta estrella”; Brian Johnson “El cerebrito”, y finalmente, Allison Reynolds, “el caso perdido” la chava tímida, rara y callada a quien nadie le presta la más mínima atención.
Su castigo no sólo será el permanecer en silencio durante todo el día, sino que al final de éste, tendrán que presentar un ensayo personal donde expliquen quiénes se creen que son. Aunque una vez que son dejados a solas es cuando la cinta comienza, centrándose en cómo cada uno de estos se ven con respecto al otro, causando que nadie se tolere en lo más mínimo y todos decidan guardar distancia entre ellos. Sería gracias a John Bender que pueden eliminar sus barreras personales ocasionando que cada uno revele el por qué fueron castigados.
Con esta sencilla temática, la película rápidamente se alzó como la voz de la juventud, al presentar una de las etapas más conflictivas de toda persona: la adolescencia, demostrándonos cómo muchos de los estereotipos a los que son sujetos los jóvenes, son consecuencia directa de la vida en el hogar.
El metraje de John Hughes rodado con tan solo un millón de dólares se convirtió en un éxito de taquilla. Y es que al descubrir que existen más similitudes que irreconciliables diferencias que nos unen a otras personas mediante las historias de cada uno de los protagonistas, la convirtieron en una cinta que no pierde vigencia aún en nuestros días.
A treinta y cinco años de su estreno en cine, El Club de los Cinco es una gran reflexión sobre los perfiles sociales de la adolescencia. Además, es una gran crítica a la sociedad, ya que ésta encasilla injustamente a los jóvenes en grupos en donde no se sienten identificados, dejando en claro que muy en el fondo, somos extraños sin nada en común, excepto todo lo demás.