En incertidumbre, 120 mil usuarios del Insabi

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  • Limbo administrativo.
  • Pacientes del anterior Seguro Popular están desconcertados porque no saben qué hacer para renovar sus pólizas, quién les brindará atención médica y en dónde.

Josélo Fuentes Delgado/La Voz de Durango

Más de 120 mil beneficiarios en Durango de lo que fue hasta el 2019 el Seguro Popular (SP) están en la incertidumbre por su situación, la mayoría familias de escasos recursos y trabajadores de clase media baja, que no gozan de prestaciones o afiliación alguna institución de salud y no pueden costear atención en un hospital privado.

De acuerdo a la información de promotores del anterior Seguro Popular, hoy Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) no han recibido notificaciones para la fase siguiente del programa, ya que tienen de acuerdo a la misma Ley 180 días, es decir, seis meses para poner en marcha al Instituto y hacer las adecuaciones necesarias.

Por el momento los pacientes pueden recibir atención médica en las instituciones del Sector Salud, Hospital Materno Infantil (HMI), en el caso de madres embarazadas y sus hijos, así como en el Hospital General 450, siempre y cuando no sean derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) o Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), lleven consigo su CURP y credencial de elector vigente, aunque hasta el momento autoridades de la Secretaría de Salud de Salud (SSD) han guardado silencio para despejar las dudas de los usuarios de sus servicios.

Actualmente la población que atiende el IMSS es de un aproximado de 547 mil derechohabientes; ISSSTE 220 mil y el ahora Insabi tiene el reto de cubrir un universo de entre los 100 y 120 mil usuarios.

En recorrido de La Voz de Durango por las antiguas oficinas del Seguro Popular, se pudo constatar que están en total abandono y las puertas lucen cerradas, algunas con cadenas y candados. Los interiores ya no tienen muebles de oficina, el personal firma hojas en blanco diariamente para comprobar su asistencia, aunque la molestia de no saber qué va a pasar prevalece en la sociedad.

Mientras este medio realizaba el recorrido por el lugar, parejas de padres de familia con niños, madres solteras, adultos mayores sin afiliación a algún programa llegaron porque tenían citas para la renovación de pólizas para garantizar la prestación de los servicios en los hospitales como el 450 o el Materno Infantil.