Por José Antonio Juárez Muñoz / Director del Museo de Numismática
(Continuación…) Para poder tener más poder salió a combatir a los liberales en Zacatecas con 150 hombres de caballería, y lo despidieron con todos los honores que no debería de recibir y dejó en el poder a su íntimo amigo Don José Rafael Peña como gobernador interino el 20 de marzo de 1860 y lo primero que hizo fue suprimir el colegio del estado y cerrar la biblioteca pública, haciendo que se devolviese al seminario sus antiguos fondos y un préstamo forzoso a sus vecinos de la capital por $20,000 pesos.
Cajen regresó al Gobierno de Durango el 17 de mayo de ese mismo año pero en junio volvió a la guerra ahora en el estado de Chihuahua derrotando a los generales Patoni y Coronado, pero no fue hasta noviembre que Patoni marchó sobre la capital con un numeroso ejército pero fue derrotado nuevamente. Cajen fue hacia Peñón Blanco a combatir liberales pero murió en un tiroteo a manos de los contrarios y otra versión nos dice que fue en el estado de Culiacán y tal vez ahogado total nunca más regresó para hacer daño al estado de Durango.
Una vez más, el general Patoni tomó el gobierno en noviembre de ese año y el obispo López de Zubiria tuvo que huir antes de la persecución y se refugió en la hacienda de Cacaria propiedad del cura Montoya y del prebendado Pereyra donde permaneció hasta 1863 que murió. Patoni estuvo como gobernador de noviembre de 1860 hasta el 25 de julio de 1861, fecha que se separó por enfermedad, regresó poco después y gobernó hasta principios de 1862. El triunfo de los liberales en Durango anticipaba el avance que iban dando sus correligionarios en varios puntos del país que recuperaron la capital de la republica el 1° de enero de 1861 dando fin a la guerra de Reforma y de nuevo Patoni puso en operación las leyes de Reforma Constitucionales de 1857 así como las leyes de Reforma dictadas por Juárez en 1859.
Esto nos da una idea de cómo fueron acuñadas las cuartillas de 1858, una del bando liberal y otra del conservador, así como la de 1860, que con sus leyendas nos decían que pensamiento tenía en ese momento nuestro estado.
NOTA. El general Patoni fue ejecutado el martes 18 de agosto de 1868 en la ciudad de Durango en el barrio antiguo de Analco, fue una venganza política.