Por Omar García Rosales
Uno de los grandes retos que muchos videojuegos tienen en sus manos, es el de igualar o superar a su predecesor. Si a esto le agregamos que las maneras de contar y presentar historias evoluciona día con día, Final Fantasy VIII dejó en claro cómo se puede contar una historia distinta sin alejarse de las bases de una saga.
El director Yoshinori Kitase y el productor Hironobu Sakaguchi en 1999 lanzaron para la PS One el título Final Fantasy VIII, historia centrada en el joven rebelde Squall Leonhart, quien pertenece a un grupo de mercenarios conocido como SeeD, que realizan diferentes misiones por encargo en todo el mundo. En una de estas misiones debe de apoyar a un grupo rebelde conocido como Los Búhos del Bosque, quienes están en la lucha por la independencia de su país. Aquí Squall conoce a la joven Rinoa Heartilly (con quien anteriormente se había encontrado) quien es miembro del grupo rebelde, que busca liberar a su pueblo de las garras de la bruja Edea.
Conforme avancemos en la historia Squall y Rinoa irán descubriendo el secreto detrás de Edea y que el objetivo secreto de los mercenarios, es en realidad un arduo enfrentamiento para derrotar a la bruja más poderosa de todas; Artemisa (Conocida en América como Ultimecia), quien busca comprimir el tiempo para dominar el mundo.
Dejando de lado la historia llena de acción de FF VII, la octava entrega de la saga aposto por una historia de amor. Ya que la actitud rebelde de Squall y la sencillez de Rinoa, terminaron consiguiendo a una de las parejas más sólidas del universo de Final Fantasy que sirvieron para atraer una enorme fanaticada femenina. Lanzado en 4 discos el título puede ser fácilmente considerado como una de las aventuras más oscuras de la saga. Ya que su trama llena de conflictos bélicos y la aparición de varios villanos que mueven la trama apocalíptica de este mundo, contrastaban con la personalidad y valentía de sus personajes.
En lo que respecta al acabado gráfico, la entrega dio un gran salto con respecto a otras sagas de la franquicia. Ya que contaba con grandes cinemas CGI con un detallado modelado de personajes, escenarios y acabado musical para la época. Aunque el título se alejó de la fantasía y magia de la saga, FF VIII trajo consigo un mundo más cercano al mundo real, en donde la tecnología, modo de vivir eran un reflejo de la vida cotidiana.
A 20 años de su lanzamiento, Final Fantasy VIII es una entrega que ha cautivado a millones de fans en todo el mundo. Y es que a pesar de no ser el título más exitoso de la saga, es uno de los más recordados y queridos por los fans, ya que aposto por grandes gráficos, un nuevo sistema de juego y el contar con uno de los finales más profundos de la saga, consiguiendo atraer a más público a la franquicia de Final Fantasy.