El guapo Juan José Silva Flores, fue llevado frente al altar de la parroquia de Santa Ana y la Sagrada Familia, para que recibiera el primer sacramento que marca la Iglesia católica, el del bautismo, por tal motivo su amorosa mamá, Ana María Silva Flores se encargó de llevarlo a dicho lugar. Para ese día tan especial fungieron como sus padrinos de honor, los señores Javier Arellano Arreola y Elsa Silva Flores. Durante la homilía la ceremonia el sacerdote Óscar Chávez Mata, señaló la importancia que los padres y padrinos tendrán en la vida futura de su ahora ahijado y de la responsabilidad que todos están aceptando ante Dios. Al culminar la ceremonia, la familia anfitriona ofreció una exquisita comida en su residencia, así como variedad de botanas, refrescantes bebidas y postres. Fue una agradable tarde familiar. ¡Enhorabuena!
Por Cinthia Sagardi / La Voz de Durango.