MTF. Alfredo Arévalo
En el artículo de hace dos semanas se concluye con una serie de preguntas, en esta ocasión abordaremos las dos primeras ¿Las niñas en realidad respetan a sus padres varones?, ¿Se comportan como niñas o tienen muy desarrollada su feminidad?, recordemos que la familia es un sistema y como tal el comportamiento de uno de ellos afecta el movimiento de los demás y como en una moneda hay dos caras dentro de la misma problemática.
En una familia donde la mujer ha tomado un papel superior al del hombre, los hijos emulan esta imagen de poder-sumisión. Supongamos que es una familia con tres hijas, dentro del sistema familiar habría 4 mujeres y un varón, como habia explicado anteriormente de la mujer se aprende el amor y del hombre la fuerza, pero ¿qué pasa cuando el varón no es valorado por la mujer?.
En el caso de esta familia las tres hijas aprenderán a desvalorizar a su padre, y con él a algunos hombres en su vida; pero no solo es cuestión de la mujer, el hombre en esta relación ha aceptado tomar ese papel y cede el poder a su esposa, pero este varón ha tenido una historia similar en sus sitema familiar de origen, en el que aprendió este mismo patrón con una madre, abuela o hermana.
No todas las familias funcionan igual, pues no hay una verdad absoluta, en esta situación o una similar lo que renueva el equilibrio en la familia es la comunicación, que al ser uno de los pilares de las relaciones es una herramienta que no debe faltar, la mejor forma de hacerlo es expresando las emociones, no iniciando una pelea, si esta relación se ha mantenido así por mucho tiempo, lo mejor es entablar la comunicación de manera periódica buscar que los niveles familares esten definidos y como pareja encontrar el respeto mutuo así como la admiración. Considerando siempre si es necesaría la ayuda de un profesional.
La segunda pregunta va ligada en una manera similar, cuando pasa la situación anterior la familia tiene límites difusos, lo que permite que en ocasiones los hijos suban un escalafón en la jerarquía, dejando su rol de niños por uno de adulto, mucho se ha dicho que se observe el comportamiento de los hijos de acuerdo a su edad, pero ¿en realidad los padres actuales tienen tiempo para eso?, si ambos trabajan es obvio que no.
En una ocasión me toco escuchar en terapia a una pareja donde la mujer decia que era la Reyna y la hija le respondia que ella tambien era Reyna, muchos factores pueden ocasionar este comportamiento, y dentro de ellos esta que solo uno de los padres tenga poder en la familia, hay un lugar disponible y cualquiera puede competir por el, y el exceso de feminidad en una niña es un sintoma de esta enfermedad, pero de igual manera puede ser una niña muy poco femenina la que este presente en la familia, en este caso esta adaptandose al vacio que dejo el varón. Pueden ser muchos aspectos que se pueden observar, lo importante es estar atentos y propiciar un cambio a tiempo.
Para las familias que tengan alguna problemática y necesiten apoyo, pueden acudir al Centro Universitario de Salud Mental (CEUSAM) en la Facultad de Trabajo Social, abierto en un horario de 4 a 8 de la tarde o al teléfono 817-66-63.
Sobreviviremos al próximo lunes si nos unimos a la paranoia colectiva, ahí estaremos a salvo… pero hay que cuestionarlo todo para cultivar tu propio criterio….