>La película, abrumadora según críticos, ha logrado hasta ahora los mayores aplausos. El filme de tres horas y media es una falsa y amarga biografía sobre un arquitecto judío (Adrian Brody) emigrado a Estados Unidos huyendo del Holocausto.
EFE
La 81 Mostra de Cine de Venecia llegó a su ecuador sacudida por la aparición de una primera favorita al León de Oro, The Brutalist, muy aplaudida por la crítica, pero con cinco jornadas aún por delante en las que todo puede pasar.
Este lunes será el día de Pedro Almodóvar, que llegará de la mano de Tilda Swinton y Julianne Moorepara presentar su primer filme en inglés, The room next door (La habitación de al lado), el martes será el turno de Luca Guadagnino y Daniel Craig con Queer y al día siguiente el de la secuela de Joker, con Joaquin Phoenix y Lady Gaga.
La abrumadora “The Brutalist” de Brady Corbet ha logrado hasta ahora los mayores aplausos; un filme de tres horas y media que es una falsa y amarga biografía sobre un arquitecto judío (Adrian Brody) emigrado a Estados Unidos huyendo del Holocausto.
También ha gustado la existencial, experimental y a la vez cómica El Jockey de Luis Ortega, la apuesta más singular hasta el momento, un jinete autodestructivo que se rebela contra quienes quieren exprimir su talento para emprender una búsqueda de identidad personal y libre.
Angelina Jolie con su retrato de María Callas apunta a premio de interpretación que le abra el camino al Oscar, como ocurrió el año pasado con Emma Stone y sus Poor Things (Pobres criaturas), pero tendrá una dura rival en Nicole Kidman, que en Babygirl se lanza a su propia aventura de liberación sexual.
También ha pasado por el Lido Jude Law con The order, un filme policíaco que se remonta a la década de los 80 para comprender el auge de la ultraderecha en Estados Unidos. Y Sigourney Weaver, que recogió el León de Oro honorífico reivindicando su libertad artística.
La alfombra roja ha vivido ya grandes momentos, como el encuentro de Cate Blanchett y Patti Smith en la jornada inaugural, la del estreno de Beetlejuice, Beetlejuice o la imagen del propio Tim Burton de la mano de Mónica Bellucci.