- Innumerables beneficios.
- Alimenta al subsuelo y recarga presas; también prevalece el riesgo de inundaciones y desborde de ríos: Jesús Frías Morales.
David Enríquez / La Voz de Durango
La temporada de lluvias que sin duda trae innumerables beneficios para la tierra porque alimenta las cosechas, recarga mantos freáticos y llena las presas, también presenta riesgos de inundaciones debido al exceso de basura en alcantarillas, pero lo más grave es que aún existen asentamientos irregulares cerca de los cauces como sucede desde hace muchos años en la presa del hielo con la complacencia de las autoridades, refiere Jesús Frías Morales.
Entrevistado al respecto el destacado ambientalista duranguense refiere la importancia de las lluvias, luego de padecer la peor sequía de los últimos cien años, según han dicho especialistas. El impacto positivo es inmediato y muy extenso, comenzando por la extinción de incendios en zonas serranas afectadas durante la temporada de estiaje.
La llegada de las primeras precipitaciones a principios de junio sirvió para comenzar la recarga de los mantos freáticos del subsuelo, tan afectados por la sequía y contaminación provocada por los seres humanos. Asimismo, destaca Frías Morales, el nivel de las presas va aumentando a grado tal que sirve para garantizar los próximos ciclos de cultivo por sistema de riego.
Todavía faltan dos meses mas de lluvia y el panorama es optimista, lo cual sin duda servirá para aminorar los efectos de la devastadora sequía y dejar en mejores condiciones las reservas hídricas el siguiente año, destaca el entrevistado.
Sin embargo, también existe el riesgo latente que provocan las fuertes avenidas de agua, especialmente en comunidades donde hay grandes afluentes que se desbordan o causan pérdidas de vidas humanas al arrasaar con todo lo que encuentran a su paso; como sucedió recientemente en el municipio de El Oro donde una familia pereció en su vehículo luego de ser arrastrada por la corriente.
Pero en la ciudad también se sufren inundaciones debido al exceso de basura que tapa las alcantarillas; ese es un fenómeno que se repite cada año a pesar de los exhortos que se le hacen a la población.
Finalmente, indicó el ambientalista que otro peligro es el desborde de ríos, arroyos y presas, especialmente cuando hay casas a sus alrededores, como en la presa del hielo donde por años y a pesar de las desgracias que han sucedido siguen los asentamientos ante la mirada inerte de los tres niveles de gobierno, puesto que la Conagua, Protección Civil y el municipio deberían intervenir para evitar conflictos.
