- Desde 250 pesos la más sencilla.
- Madres de familia prefieren gastar esa cantidad de dinero en productos más esenciales.
César Rodríguez / La Voz de Durango
En la temporada de la Rosca de Reyes, una tradición arraigada en la cultura mexicana, los duranguenses se enfrentan a precios elevados que dificultan el acceso a este manjar festivo. Los altos costos de las roscas han generado preocupación entre la población, ya que algunos consideran que este producto típico se está convirtiendo en un lujo exclusivo para unos pocos.
En un contexto donde la situación económica ya es desafiante para muchos hogares, el incremento de precios de las Roscas de Reyes supone un obstáculo adicional para disfrutar plenamente de esta celebración. Residentes expresan su descontento y preocupación, señalando que estos precios más altos podrían alejar a las familias de esta tradición ancestral.
En un recorrido realizado por este medio de comunicación, se llegó a observar que en promedio los precios van desde los 250 pesos una rosca mediana sin algún tipo de relleno y alcanzan hasta los 600 pesos para una rosca grande, costos que dejan fuera a varios sectores.
Para Rocío Montelongo, madre de familia, indicó que parece ser que las panaderías aprovechan la festividad y exageran sus precios, por lo que lamentablemente este año sólo comprará una pequeña rosca para que sus hijos no se queden sin probarla, ya que prefiere gastar esa cantidad de dinero en productos más esenciales.
“Este año están muy caras las roscas, los niños son a los que les gusta la festividad, pero después de los gastos de diciembre es complicado gastar tanto dinero”, mencionó.
Por su parte, vendedores locales también reconocen la problemática y atribuyen este aumento de precios a diversos factores, incluyendo el encarecimiento de los insumos y los costos de producción. Sin embargo, algunos buscan alternativas, como ofrecer roscas de tamaños más pequeños o ingredientes más económicos, para intentar mantener viva la tradición sin impactar tanto en el bolsillo de las familias.
En medio de este panorama, surge un llamado a la reflexión sobre cómo preservar las tradiciones culturales sin que estas se vuelvan inaccesibles para amplios sectores de la sociedad. La esperanza de muchos es encontrar soluciones que permitan disfrutar de la Rosca de Reyes sin que su costo represente una barrera para la participación de todas las familias en esta festividad tan significativa.