>El musical, protagonizado por Ariana Grande y Cynthia Erivo, y dirigido por Jon M. Chu, sigue la aventura de Elphaba, una joven de piel verde y poderes sobrenaturales, hasta convertirse en la Malvada Bruja del Oeste.
EFE
El mundo de Oz, origen de una de las películas más celebradas de la historia del cine, resurge con fuerza en la adaptación a la gran pantalla del exitoso musical de Broadway Wicked, una superproducción llamada a romper taquillas con ayuda de su protagonista, la cantante y actriz Ariana Grande.
Wicked, primera entrega de las dos partes en las que se dividirá la historia, sigue la aventura de Elphaba (Cynthia Erivo), una joven de piel verde y poderes sobrenaturales, hasta convertirse en la Malvada Bruja del Oeste, así como su amistad con la bruja buena Glinda (Ariana Grande).
La película reimagina el universo de Oz con un despliegue visual suntuoso, abundantes números musicales y la trama que ha convertido su versión escénica en un musical de culto en Broadway y el West End londinense.
En la presentación de la película este martes en un hotel de Londres, el director John M. Chu reconoció haber sentido el peso del legado de una saga que nació con el libro El maravilloso mago de Oz de L. Frank Baum (1900), que la película El mago de Oz llevó al Olimpo de la ficción (1939) y que Gregory Maguire convirtió en la novela Wicked en 1995.
«Al principio tenía la sensación aplastante de que muy pocos directores consiguen construir Oz. Es como un viejo amigo. Pero cuando lo revisas, te das cuenta de que no lo conoces tan bien y debes encontrar tu camino en el tornado. Así que quisimos llevar a la gente a la edad de oro de Hollywood para presentar este gran cuento de hadas, el mayor espectáculo que podemos imaginar», dijo Chu.
El director (autor de Crazy Rich Asians o In the Heights) explicó que los intérpretes tuvieron que «ser vulnerables» y «mostrar sus heridas», porque no se encontraban solo ante la adaptación de un musical sino ante la búsqueda de «la verdad de unos personajes que hemos conocido durante mucho tiempo en la iconografía del cine».
Junto a Chu, una emocionada Grande, que se enfrenta a su mayor papel cinematográfico tras alcanzar el estrellato de la nueva generación del pop, aseguró haber tejido unos fuertes lazos con el resto del reparto y especialmente con Erivo.
¿CUÁL ES EL REPARTO?
El reparto incluye a jóvenes promesas como la propia Grande, Erivo o Jonathan Bailey, que interpreta al apuesto príncipe Fiyero, junto a nombres consagrados del cine como Michelle Yeoho, Jeff Goldblum, quien encarna al mago de Oz.
En la película, Glinda y Elphaba se conocen siendo jóvenes en la universidad de Shiz, donde forjan una improbable amistad, y juntas acaban descubriendo la verdad sobre el mago y la inquietante Madame Morrible (Yeoh).
Goldblum aportó la reflexión intelectual sobre su personaje, al que calificó de «carismático y divertido» pero al mismo tiempo rodeado por «elementos oscuros en su personalidad que son importantes política y culturalmente para esta historia».
«Es la única persona en este universo alternativo que viene de la Tierra, y de Estados Unidos. Importa cosas que no son solo inventivas como Thomas Edison, sino también propias de estafadores y timadores, y esta cosa de demonizar al otro para alcanzar el poder», dijo el actor.
Yeoh subrayó el sentido de comunidad que se creó entre los actores a lo largo del rodaje, aunque recordó su incredulidad al recibir la llamada de Chu para participar en un musical: «¿Estás loco? ¡Si yo no canto! ¿Y además quieres que salga junto a Ariana y Cynthia?», dijo entre risas.
Precisamente sobre las canciones, Grande, que despliega su capacidad vocal como soprano, tuvo que aprender a «transformar los músculos» de su garganta para adaptarse a las exigencias musicales de Wicked, muy diferentes a su estilo como cantante pop.