- Reto económico.
- La Unión Nacional de la Industria de la Masa y la Tortilla insta a los ciudadanos a comprar en negocios formales para garantizar calidad en el producto.
Marco Santos / La Voz de Durango
El aumento del comercio informal en Durango persiste, afectando incluso a las tortillerías, lo cual ha sido una problemática en los últimos años. Este fenómeno impacta negativamente, llegando a reducir hasta un 30 por ciento de las ventas en las tortillerías formales.
Es relevante señalar que, en la mayoría de los casos, los negocios informales ofrecen tortillas de baja calidad. Algunos de ellos llegan a vender el kilo en 14 pesos. Este precio, según expertos en el tema, se sitúa por debajo del costo de producción, lo que perjudica a los comercios establecidos que ofrecen tortillas de calidad. Asimismo, las grandes cadenas comerciales que ofrecen tortilla a precios muy bajos suelen utilizar insumos más económicos, lo que afecta la calidad del producto.
Recientemente, la Unión Nacional de la Industria de la Masa y la Tortilla en Durango anunció que no habrá un aumento en el precio de la tortilla, que oscila entre los 19 y 22 pesos por kilo en la capital. En este contexto, instan a la ciudadanía a consumir en negocios establecidos, asegurando así la obtención de un producto de calidad.
Además, el comercio informal no únicamente afecta económicamente a las tortillerías formales, sino que también genera una competencia desleal. La informalidad en la venta de tortillas suele eludir los impuestos y regulaciones, poniendo en desventaja a los negocios establecidos que cumplen con todas las normativas.
En esa línea, la mala calidad de las tortillas informales puede representar riesgos para la salud de los consumidores, pues la falta de controles y estándares en la producción informal podría contribuir a problemas de higiene y seguridad alimentaria, afectando directamente a los ciudadanos.
