El actor se sinceró sobre sus problemas de alcoholismo.
Agencias
La estrella de cine Tom Holland aseguró que ser abstemio es “lo mejor que ha hecho en su vida”, luego de darse cuenta de que se había convertido en un “esclavo” del alcohol.
Hablando para el podcast On Purpose con Jay Shetty, la estrella dijo que su viaje hacia la abstinencia comenzó con una Navidad “de mucha, mucha borrachera” el año pasado.
Según contó, después de decidir que iba a abstenerse de tomar al alcohol durante el mes de enero, “lo único en lo que podía pensar era en tomar una copa. Me dio mucho miedo”.
“Me dije: tal vez tengo un pequeño problema con el alcohol”.
Darse cuenta de eso lo incitó a extender su regla de no beber por un mes más, pero le costó resistirse a la cultura del alcohol.
“Sentía que no podía ser sociable”, dijo Holland. “Sentía que no podía ir al bar y tomarme un refresco de limón. No podía salir a cenar. Realmente me estaba costando muchísimo”.
“Simplemente me dije a mí mismo: ¿por qué? ¿por qué estoy esclavizado a esta bebida? ¿por qué me obsesiona tanto la idea de beber?”.
Conmocionado, se puso la meta de cumplir seis meses sin beber, y en su cumpleaños 27, el 1 de junio, se dio cuenta de que había logrado dar un giro.
Para entonces, dijo, era “más feliz que nunca”.
La estrella enumeró algunos de los beneficios que había sentido desde que dejó de beber.
“Podía dormir mejor. Podía manejar mejor los problemas”, dijo. “Las cosas que iban mal en los rodajes, que normalmente me molestarían, podía tomarlas con calma. Tenía mucha más claridad mental. Me sentía más sano, más en forma”.
“Me alegra decirlo: era sin duda adicto al alcohol. No lo niego en absoluto”.