- Marcha lastimó un edificio icónico.
- Ciudadanos señalan la falta de valores de las nuevas generaciones, pues al final los afectados son todos como sociedad y no los culpables de la violencia para la mujer.
César Rodríguez/ La Voz de Durango.
A la culminación de la marcha del 8M, fueron afectados edificios históricos de la ciudad capital, entre ellos la Catedral Basílica Menor, la cual presenta severos daños de pintura de aceite en su fachada.
El padre Noé Soto Valdez, vocero de la Arquidiócesis de Durango, precisó que lamentablemente esta marcha dañó un edificio icónico de la entidad, el cual es considerado Patrimonio Cultural de la Humanidad.
De tal manera, la Iglesia cuenta con seguro de gastos, sin embargo, la Catedral no puede vandalizarse cada año, por lo que urge una solución y el diálogo entre los colectivos feministas.
Indicó que a pesar de que se solicitó más seguridad, las propias mujeres lastimaron a los elementos femeninos de la Dirección Municipal de Seguridad Pública (DMSP).
Carencia de valores
Al término de la entrevista, al exterior de la Catedral, Ofelia Martínez expresó sentirse ofendida que las propias mujeres hayan vandalizado un edificio tan importante para los creyentes duranguenses.
«Las que hicieron esto no tienen conciencia, se supone que nos representan y esto no es algo que yo quiero, faltan valores entre las jovencitas, nosotros no queremos esto, los afectados somos nosotros y no los responsables de la violencia contra la mujer», sentenció.