- De la Zona Centro.
- Escalones, escaleras, ascensores, puertas en mal estado, rampas inaccesibles y baños públicos no adaptados, principales afectaciones.
César Rodríguez / La Voz de Durango
Las barreras arquitectónicas que se encuentran en la Zona Centro, es uno de los temas pendientes para permitir la movilidad de las personas con discapacidad en la sociedad.
A decir del presidente del Movimiento para la Inclusión y Democracia de las Personas con Discapacidad, Efraín Gómez, puntualizó que si bien hay una diferencia a comparación de otros periodos, aún falta mucho camino por recorrer para que Durango se considere una ciudad inclusiva.
Explicó que actualmente no se siguen los lineamientos de accesibilidad para personas con discapacidad, puesto que escalones, escaleras, ascensores, puertas en mal estado, rampas inaccesibles y baños públicos no adaptados, son las principales afectaciones que día con día tienen que lidiar al visitar el primer cuadro de la ciudad.
Explicó que las condiciones del Centro Histórico no solo limitan a las personas con discapacidad, también adultos mayores, mujeres embarazadas, madres de familia, además de cerrar las puertas al turismo.
“Tenemos que hablar en estos tiempos de una accesibilidad universal y no encajonar las condiciones para personas con discapacidad, estos son accesos que a todos nos van a servir cuando lleguemos a adultos”, comentó.
Por otro lado, hizo hincapié en crear conciencia entre la sociedad, ya que la falta de movilidad es un problema grave, con consecuencias en muchas facetas de la vida de las personas con discapacidad, por lo que se solicita a las autoridades poner especial atención para paso a paso convertir a Durango en una ciudad incluyente.