Calambur: Todo porque rías / Todo porquerías

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Por: Aarón Quiñones

No estamos preparados para tener estas “libertades”, no las entendemos

Esta semana ha estado en boca de todos el tema de la ampliación de horario para la venta de bebidas alcohólicas en restaurantes, bares, antros y por su puesto expendios de esta ciudad capital, es decir pasar de 23:00 horas para expendios y 01:00 para el resto, a homologar todo a las 03:00 am, con la intención de castigar el clandestinaje. Propuesta y legado que el actual presidente municipal Jorge Salum Del Palacio quiere dejar ante su inminente salida de la administración municipal.

Hay polémica por las versiones encontradas, se han realizado foros para discutir los pros y los contras, ojo no sabemos donde por que a los medios de comunicación no se nos ha invitado a cubrir uno solo, pero lo importante es más allá de las filias personales, la ciudadanía está preparada para esto, yo creo que no.

Cuando comenzó la pandemia hace dos años en Durango hubo restricciones, simples indicaciones de aforo y que no se realizarán fiestas en domicilios particulares, por que nuestra vida estaba en riesgo, aún lo está pero no hicimos caso. Policías municipales y estatales fueron forzados a trabajar turnos de 48 horas para poder darse abasto y disminuir esta desobediencia civil. Hubo gente que hizo trabajo comunitario tras verse descubiertos embriagándose en fiestas masivas en la calle.

Cada año que hay elecciones en Durango, no es exageración, cada año tenemos alguna clase de comicios como el festival del ego de este domingo 10 de abril, se implementa la Ley seca, este 2022 no hubo pero el pasado 2021 sí. De ese día les comparto una experiencia personal, unos vecinos del fraccionamiento Huizache II decidieron al no tener que ir a trabajar que iban a beber y escuchar música de la más fina selección desde las 22:00 horas del sábado hasta las 07:00 horas del domingo, día en que los que si trabajamos acudimos a realizar nuestra labor. No hubo policías, nadie vino y nadie en dos cuadras a la redonda durmió. Cómo pasó eso si la ley seca estaba vigente desde el viernes.

El clandestinaje es igual de viejo que la prostitución, no lo vamos a quitar así se amplíe 24 horas, los duranguenses no estamos preparados para tener estas “libertades”, no las entendemos, no tenemos ese nivel de educación y nuestra sociedad se puede descomponer aún más.

Ahí viene el pensamiento comercial y el liberal (el de los jóvenes), y ambos los entiendo; entiendo al empresario que necesita tener más venta, el alcohol deja grandes ganancias y por supuesto ese dinero nos hace falta a todos, el movimiento en una ciudad pequeña llena los bolsillos de taxistas, el consumo de gasolina, comida rápida y hasta de los servicios médicos. Mientras que como joven entre los 18 y 40 años de edad, consumir bebidas alcohólicas libremente, andar por la calle comprando unas “cervezas” a las tres de la mañana suena por demás divertido y sin ser hipócrita salir de un antro a las tres de la mañana es una libertad de la edad adulta por las que se espera 18 años, ambos pensamientos los entiendo, pero no significa que estén bien por el costo que representan, sino me creen pregúntenle a la familia de cada víctima de un conductor ebrio que opina, por ejemplo a la familia de Chuy.

Los operativos anti alcohol no funcionan (Los evaden y terminan muertos en el anillo periférico), la vigilancia a través de patrullaje no funciona porque no hay leyes que a un policía municipal le permitan entrar a un domicilio y multar a una persona por ruido excesivo, sin tomar en cuenta que para eso se necesita personal y en una noche el total operativo de policías ha de rondar los 80 elementos, esto para una ciudad de alrededor de 30 kilómetros de radio y los más ochocientos mil habitantes.

Como vecino de un expendio sé de primera mano las molestias que representa su horario de operación, imagine usted todos los días personas ebrias haciendo sus necesidades en la banqueta o en su puerta, todos los días del ruido que producen dos bafles de perifoneo en la cajuela de un Nissan, Tsuru, con las finas letras de Natanael Cano, todos los días de recoger botes de aluminio y vidrios de botellas de cerveza, todos los días de escuchar el ruido que produce una bocina diseñada para espectáculos en vivo y que un orangután enciende en un espacio de 3 por 8 metros desde las 09:00 am hasta las 23:00 pm, sin olvidar el constante ruido de personas discutiendo y saber que una mujer no puede entrar a su casa porque hay borrachos en su entrada y después de todo eso ¿ampliar el horario hasta las 03:00 am, sería bueno?

Sin irme hasta los extremos pero siendo muy firmes, de aprobarse sin revisar a conciencia esta ampliación se tendría que recurrir a la figura del amparo ya que la autoridad cuya función principal es cuidar a todos los ciudadanos, está dándole preferencia a un solo sector, entonces las figuras jurídicas tendrían que darle para atrás a estas “innovaciones”. Señor alcalde Jorge Salum y asesores jurídicos, aquí les va a una propuesta seria para componerles la plana a su equivocada postura, ¿quieren ampliar el horario de venta de alcohol?, muy bien que se apruebe bajo un impuesto especial (muy alto), para antros, bares y restaurantes, y que ese dinero se destine mensualmente para la creación y atención en centros de adicciones institucionales, además que un expendio pague el mismo impuesto y solo pueda ampliar su horario de venta si se encuentra ubicado en una zona comercial, es decir que no tenga vecinos inmediatos, con la obviedad que las bocinas están prohibidas. Eso señores políticos es hacer historia, y darle su justo lugar a cada ciudadano, hashtag, ¡DeNada!.

Los de a pie vamos a seguir pagando por los que andan a caballo.

Qué sorpresa nos acabamos de dar este fin de semana, en lo personal desconocía a qué grado han aumentado el costo de las multas por estacionamiento en la Zona Centro en esta ciudad de Durango. Del año pasado que se podía pagar 120 pesos al siguiente día de la sanción, hoy en día subió al triple, es decir casi 360 pesos. ¿Algo muy drástico no?, pero lo mismo pasó con los permisos para los negocios, de 200 pesos pasaron a 900 en un año, el último por cierto de esta administración.

De este caso nos dimos cuenta a través de las redes sociales, donde un tweet fue rápida y tontamente contestado por Finanzas municipales justificando el aumento debido al valor de la UMA, es decir el aumento al salario mínimo. Lo que desconcierta es que ese aumento no fue del trescientos por ciento que yo sepa, o a lo mejor no fui enterado pero mi salario y el de la mayoría de las personas que conozco no aumentó tres veces.

Como quieran justificarlo, pasar de 120 pesos al triple es demoledor para cualquier persona, eso quiere decir que los multados del operativo antialcohol pagan casi nueve mil pesos por su falta o esto solo aplica al grave delito de no pagar parquímetro en la Zona Centro.

Para quienes vivimos aquí estamos acostumbrados a que la aplicación de Parquimovil que a pesar de que no funciona, la sigue contratando misteriosamente el municipio, por lo que tenemos que ir a algún local comercial a pagar los 12 pesos por tres horas que te admite como máximo, sin tener que volver a poner otros 12 pesos por que tu jornada laboral es de ocho horas mínimo, bueno eso cuando el comercio está abierto, cuando el comercio está cercano. Si usted no sabe todo esto, si usted viene de Coahuila, Sinaloa, Zacatecas, Chihuahua, Monterrey o algún municipio, pues déjeme decirle que no se estacione en la calle, pague los 16 pesos por hora, promedio, que está cobrando un estacionamiento privado por que la multa le va a salir cara, sin contar que tiene que ir hasta la unidad administrativa por su placa de circulación.

Lo más grave creo yo de esta situación es que este abuso en el aumento de multas pasó aprobado por nuestros regidores, si esos que a diario salen rasgándose las vestiduras en los medios de comunicación para decir que están trabajando por la ciudadanía. ¿Trabajando? … y dejas que el Ayuntamiento nos la introduzca con un doblez, (dicho suavizado de Gerardo Fernández Noroña). Los aumentos fueron desmedidos en una economía devastada por la pandemia, la administración está quebrada y no es culpa del ciudadano, fue culpa de sus administradores a los que no se les metió a la cárcel.

Este viernes el Cabildo aprobó un punto de acuerdo para hacer un exhorto al titular de finanzas del estado Arturo Díaz Medina a que dé una explicación de por qué las participaciones Federales, cerca de 450 millones de pesos, no han ingresado a las arcas municipales, pero es absurdo que pase esto, por que todo mundo sabe que ese dinero no ingresa porque el Gobierno estatal actúa como albacea (mamá), del municipal por la deuda que el mandato de José Ramón Enriquez adquirió con una compañía privada por las luminarias y que fue renegociado. Para que todos entendamos, el dinero de las participaciones no le llega al municipio porque ya lo debe a la compañía de las luminarias que se dejaron de instalar y que vamos a tener que seguir pagando usted y yo por varios años más, a ese grado fue el daño que dejó el flamante candidato a la gubernatura por Morena el 4 de junio, si Dios y los magistrados quieren.

Ese desfase en la economía del municipio nos lo están cobrando a todos con las multas y los impuestos elevados, cuando se debería de meter a la cárcel a quienes dañaron al erario público, pero por lo visto los de a pie vamos a seguir pagando por los que andan a caballo.