- Fue una de las sedes de la Casa de Moneda.
- El historiador Javier Guerrero Romero, consideró que el Instituto Nacional de Antropología e Historia debe intervenir.
Rosy Gaucín/La Voz de Durango
Desde hace unas semanas el edificio del Club de Leones de Durango, que se ubica en el Centro Histórico de la ciudad, luce de color azul, el que no se encuentra dentro del catálogo que se debe utilizar para inmuebles considerados con valor histórico.
El historiador Javier Guerrero Romero, en entrevista para La Voz de Durango, expuso que este edificio puede ser utilizado para otros fines diferentes a la asociación civil, siempre y cuando no se agreda en las adecuaciones al mismo.
No obstante, el color que se le puso está fuera del catálogo de colores permitidos en el Centro Histórico, y en ese sentido se considera una agresión al inmueble, “tengo entendido que el INAH tomó ya cartas en el asunto, y puso sellos de clausura”.
Sin embargo, mencionó que debe hacerse una acción legal que permita que se regrese a un color permitido en la paleta, y es muy amplia la gama de colores que se permiten para el Centro Histórico, pero ese en particular no está autorizado y debe de revertirse.
Asimismo, consideró que tanto el Ayuntamiento como el INAH, deben de verificar si las adaptaciones que se hicieron para el cambio del edificio no afectan la estructura de la parte histórica del edificio que data el siglo XIX, y que forma parte de la arquitectura simbólica del estado de Durango.
Fue una de las casas de Moneda de Durango, se tuvieron tres sedes, esa fue una, la otra es donde está el Templo del Sagrado Corazón y otra donde está actualmente es la Casa de la Cultura, es decir, de las tres que hubo, se conservan dos.
Por ello, es importante este espacio por su valor dentro de la historia local como el valor dentro de la tipología de la arquitectura de Durango, que es ecléctica y dentro de las variantes el movimiento neoclásico, “y que yo denominaría como republicana”, finalizó Guerrero Romero.