- Es urgente.
- “Lo que antes estaba prohibido para nosotras, gracias a la lucha de estas incansables mujeres, yo
puedo estar parada aquí y dispuesta a seguir con su encomienda para buscar la igualdad de derechos”, dijo la diputada Marisol Carrillo.
Alejandro Valencia / la Voz de Durango
Se tiene que eliminar la brecha de desigualdad social, laboral, de justicia y económica que viven las mujeres con la participación de las autoridades y de la sociedad en general, expresó la diputada Marisol Carrillo.
Recalcó que el Día de la Mujer no se celebra, se conmemora a nombre de las trabajadoras de una fábrica en Nueva York que se declararon en huelga para exigir mejores sueldos, para que luego, sus superiores prendieran fuego al edificio con 129 trabajadoras encerradas adentro, teniendo un resultado trágico.
Desde entonces y a la fecha, gracias a la labor de miles de feministas han ganado derechos, como votar y ser votadas, la planificación familiar, a tener un trabajo, al acceso a la educación superior, a decidir con quién casarse, a manejar su patrimonio, alcanzar cargos públicos y salarios iguales solo.
“Lo que antes estaba prohibido para nosotras, gracias a la lucha de estas incansables mujeres, yo
puedo estar parada aquí y dispuesta a seguir con su encomienda para buscar la igualdad de derechos”, dijo.
Por tal motivo se debe repetirlo hasta el cansancio que la igualdad de género no solo es un derecho humano fundamental, sino también un requisito para acelerar el bienestar social y el desarrollo económico, lograr la participación plena de las mujeres en las diferentes esferas políticas, sociales y laborales debe ser una prioridad en la agenda de la política pública y una responsabilidad conjunta de los hombres y las mujeres.
“Es momento de dar un gran paso para nuestra sociedad, debemos entender, internalizar y combatir que se trata diferente a una mujer de un hombre; desmontar esos sesgos culturales que nos dividen y nos muestran diferentes, prejuicios que se convierten en juicios que son aplicados de distinta forma entre los géneros”, agregó.
Dijo que a una mujer se le llama dramática, en vez de empática, intensa o mandona en vez de lideresa, y por los mismos comportamientos a un hombre se le llama asertivo, sensible y trabajador.
“Mi lucha en el feminismo ha sido larga y quizá falta mucho por lograr una igualdad real y sustantiva entre hombres y mujeres, probablemente a nuestras generaciones no les toque vivir esa tan anhelada igualdad, sin embargo, hoy en el presente haré lo posible por sentar esas bases que son necesarias, porque claro que sí hay formas de acortar esa brecha de desigualdad que tanto afecta a las mujeres, porque la igualdad o es real o no es”, indicó.
Concluyó al decir que duele la muerte de otras mujeres y existe odio de no poder caminar tranquilamente a casa.
“Por todas las madres que se preocupan cada vez que sus hijas salen de noche, porque estamos cansadas de tener miedo, para no volver a llorar el asesinato de nuestras madres, hermanas y amigas; para no mandar más mensajes con un ‘’avísame cuando llegues’’. Basta ya de minutos de miedo, de humillación, de dolor, de silencio, ¡Tenemos derecho a que todos los minutos sean de libertad, de felicidad, de amor, de vida! ¡Ya no pedimos permiso, pedimos respeto!”, aseveró.

