- Importaciones han aumentado 14%.
- Segalmex no pone en operación esquema de comercialización de frijol, “abre” las bodegas, pero no recibe la leguminosa: Pedro Silerio.
- Productores, a expensas de “coyotes”.
Perla Rodríguez / La Voz de Durango
La situación actual en el campo de Durango es complicada, derivado de nulos apoyos para el sector, de los recortes del Gobierno federal, y actualmente de manera precisa de irregularidades en la comercialización del frijol.
Si bien ya está en marcha este esquema de comercialización, en Durango realmente no está operando. El presidente de la Confederación Nacional Campesina (CNC), Pedro Silerio García, denunció que de manera omisa Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) no pone a operar el esquema.
Y es que “abre” las bodegas, pero sin recibir el frijol de los productores duranguenses, dijo. “Abre las bodegas, pero entre comillas porque no está recibiendo, sus normas son muy estrictas, que si la humedad, impurezas, etc. Pero no reciben, y con esto se quedan los productores a expensas de los ‘coyotes’, y del intermediario”.
De esta manera se les paga a 12 pesos el kilo de frijol, mientras que en el esquema se determinó que fuera de 16 pesos. “No se recuperan ni los gastos. Aquí lo lamentable es que pudiéramos entrar en una crisis alimentaria”.
Esta crisis, advirtió el presidente de la CNC, derivado que no haya producción de trigo, maíz, granos, aunado a que las importaciones se han incrementado en más de un 14 por ciento, con insumos de un 60 por ciento por arriba de lo que estuvieron al inicio de este año.
Silerio García reiteró que “si se descuida la alimentación del país, estamos expensas a una crisis alimentaria que sería de consecuencias fuertes”.
En ese sentido, argumentó que los apoyos de estímulo a la producción y productiva del campo, han sido solicitados al tratarse de una actividad vulnerable, que está afectada por los fenómenos climatológicos, pues “cuando no hay heladas, hay sequías, y cuando no hay sequías hay inundaciones, y es una actividad esencial porque de ahí comemos todos. Y si no la protegemos, vamos a estar supeditados a lo que produzcan otros países, y vamos a ser dependientes”.

