Por: María Itzel Guereca Meza
Hola, ¿Cómo están estimados lectores? Agradezco los comentarios de quienes me acompañan semana a semana. Como en cada intervención les comparto un tema de interés y en esta ocasión no será la excepción.
El dolor es un experiencia emocional y sensorial desagradable asociada a un daño tisular. Funciona como un mecanismo que da una señal de alarma para evitar usar o tener contacto con la zona lesionada. Es un fenómeno sensorial y perceptual que causa un sufrimiento físico y emocional.
La sensación es una experiencia física que puede ser confirmada por métodos electrofisiológicos, sin embargo, en la práctica sólo es una sensación subjetiva. La naturaleza e intensidad del dolor depende de factores internos y externos, es decir, un mismo estímulo puede percibirse de diferente manera dependiendo de condiciones somáticas (partes del cuerpo) y psicológicas.
Podemos clasificar al dolor en crónico y agudo, que se diferencian por sus características. En principio el agudo advierte sobre peligro evidente o subsiguiente y generalmente es el reflejo de un tejido lesionado. Tiene una duración de menos de 3 meses, se presentan dolor en la zona afectada, acompañado de inflamación, enrojecimiento y aumento de la temperatura local, y generalmente se incrementa cuando colocan algún objeto o tocan la zona de lesión y disminuye cuando lo retiran.
El dolor crónico por su parte Lo causa la parte lesionada del cuerpo, se debe a inflamación crónica, al cambio en la sensibilidad de algún nervio, emoción o previa lesión traumática y cambios en el cerebro. Dolor que dura más de 3 meses, este no es el resultado de una lesión y suele ser generalizado, es decir, no lo percibes en una sola zona. No es predecible y no está relacionado a un movimiento o actividad particular, se presenta con hipersensibilidad a cualquier estímulo que cause una ligera molestia acompañado de factores psicológicos como depresión, miedo y ansiedad.
Aunque a la hora de la terapia para los fisioterapeutas puedan existir signos de más urgencia, para los pacientes el dolor siempre va a ser un síntoma muy relevante que se debe atender en igual proporción a la regeneración de los tejidos afectados. Y justamente por eso existen varias formas de modular el dolor como lo son, la farmacoterapia, la neuromodulación, la fisioterapia e incluso la psicología. Para dudas, valoraciones o tratamientos, me encuentro a tus ordenes en Hüman Kinetic´s o al teléfono 6181588892.

