Las muertes por la Covid-19 superaron el martes las 2.000 en un solo día por primera vez desde mayo y las hospitalizaciones alcanzaron un récord de más de 89.000 el miércoles.
Agencias
Washington.- Los estadounidenses desafiaron las súplicas de las autoridades de quedarse en casa para la festividad de Acción de Gracias, a lo que los responsables sanitarios respondieron advirtiendo que la puesta en marcha de una vacuna está todavía a semanas de distancia.
El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, se unió a los llamamientos a la seguridad, instando a la gente a renunciar a las grandes reuniones familiares, usar mascarilla y mantener el distanciamiento social.
“Sé que podemos y venceremos este virus”, dijo Biden en un discurso pronunciado en un teatro casi vacío de Wilmington, Delaware, ante un puñado de empleados y reporteros con mascarilla y sentados en el suelo formando círculos con distanciamiento físico. Biden no usó mascarilla.
Las muertes por la COVID-19 superaron el martes las 2,000 en un solo día por primera vez desde mayo y las hospitalizaciones alcanzaron un récord de más de 89,000 el miércoles, mientras el país ha registrado ya 2.3 millones de nuevas infecciones en las últimas dos semanas.