Polonia y los Países Bajos acusaron que el equipo, adquirido a un proveedor del gigante asiático, no cumple con los estándares médicos requeridos para su entrega.
Agencias
La Unión Europea informó este jueves que suspendió la distribución de 10 millones de cubrebocas provenientes de China entre sus estados miembros y Reino Unido luego de que dos países se quejaron sobre la mala calidad de los lotes que recibieron.
Como parte de los esfuerzos para afrontar la crisis por el COVID-19, la rama ejecutiva de la UE empezó este mes a entregar las mascarillas al personal de salud.
Después de que un lote de 1.5 millones de cubrebocas fueron enviados a 17 de los 27 estados miembros y Reino Unido, el ministro de Salud de Polonia, Lukasz Szumowski, informó que 600 mil de los equipos recibidos por las autoridades polacas no contaban con los certificados europeos y no cumplían con los estándares médicos requeridos para su distribución.
“Hemos decidido suspender distribuciones futuras de los cubrebocas”, aclaró el portavoz de la comisión de salud, Stefan De Keersmaecker. “Ya veremos qué medidas deberán ser tomadas si en verdad se trata de un problema de calidad con estos cubrebocas”, agregó.
De acuerdo con De Keersmaecker, otro estado miembro, los Países Bajos, ha detectado problemas similares hasta ahora.
El lote completo de mascarillas fue comprado a un proveedor chino a través de un fondo de la UE. Su distribución estaba programada en entregas semanales a lo largo de seis semanas.
De Keersmaecker aseveró que la Comisión siguió escrupulosamente todas las medidas de control al momento de adquirir los cubrebocas y verificó que eran utilizables.
“De ser necesario por supuesto que tomaremos cualquier medida legal requerida”, sostuvo.
Agregó que la comisionada de Salud y Seguridad Alimentaria, Stella Kyriakides, ha alertado a todos los países que de antemano recibieron las mascarillas sobre los riesgos y les pidió que ofrecieran comentarios respecto a la calidad de los equipos.
“Es de la mayor importancia que el equipo de protección personal enviado por la Comisión sea de la más alta calidad. Eso resulta fundamental dado que el equipo es utilizado por ciudadanos y profesionales del sector salud”, enfatizó De Keersmaecker.