- Karla Ivonne Cabrales Silva nos habla del papel del juzgador en la sociedad
Hoy en todo el país se conmemora el Día del Juez, máxima autoridad de un tribunal de justicia, cuya principal función es precisamente administrar justicia, en caso que se presente ante él una situación controvertida entre dos personas, es por eso que La Voz de Durango habló con la juez Karla Ivonne Cabrales Silva, para conocer de primera mano la función que juega en los procesos legales de una persona.
Para ella, la imparcialidad, sensibilidad, el apego al derecho son características esenciales de un juzgador sin importar si es penal, familiar, civil, mercantil, etcétera.
“Cada una de nuestra materia observamos situaciones de vida muy complicada, nosotros definimos y decidimos lo que es importante para las personas, durante un divorcio, pensión alimenticia, una libertad, un encarcelamiento”, definió.
A pesar de ello hay ocasiones en que el ciudadano afirma que “no existe la justicia” y esto se da porque alguna de las partes que están un juicio termina insatisfecho con el resolutivo de un juez, pero aún así la especialista en materia penal aseguró que siempre existirán otros recursos donde el inconforme puede apelar la resolución.
En el caso de los delitos penales, la sociedad constantemente emite una postura desaprobatoria en los veredictos, pues su percepción es que cualquier delincuente puede salir con solo pagar una fianza o todo lo contrario, que pase el resto de su vida tras las rejas, sin embargo, esto no es así y eso se puede corroborar en el 19 del Código Penal del Estado Libre y Soberano de Durango.
A raíz de eso, surge una cuestión interesante que está relacionada al costo de tener a una persona en un reclusorio, pues hoy en día la media nacional refiere que se gastan 500 pesos diarios, en tal sentido la juez abrió la incógnita de por qué no darle una segunda oportunidad a una persona que por cuestiones extremas decido infringir la ley.
“Si esta mercancía se recupera, porque no darle la oportunidad de acceder a una salida, qué es más costoso para la ciudadanía, que quede adentro cuando se recuperó lo robado cuando no hizo uso de violencia, cuando es la primera vez que delinque o que esta misma persona acceda a una salida”, comentó.
En conclusión, el juez siempre tendrá la obligación de ver por el bienestar del ciudadano sin dejar que la balanza se incline hacia el acusador o el acusado, es por eso que se afirma que la justicia es ciega, pues al final del día todos somos personas que vivimos en sociedad y siempre habrá consecuencias de nuestros actos, pero también alternativas para redimirnos y todo eso recae en los hombros de un juzgador.
Por Alejandro Valencia / La Voz de Durango
