- Raúl Obregón Almodóvar recibió un reconocimiento a su trayectoria deportiva.
- Para el fue emocionante reencontrarse con muchos de sus compañeros universitarios.
Genaro Gabriel Ascencio Ortega
La Voz de Durango
“Me siento muy emocionado, contento, conmovido de regresar a mi casa, a mi Alma Mater a mi querida Universidad guares del Estado de Durango, a la que le debo toda mi formación desde secundaria hasta el doctorado”, expresó Raúl Obregón Almodóvar, para La Voz, al salir del Aula Magna Laureano Roncal en el Edificio Central de la UJED, tras la ceremonia de reconocimientos en vida a las figuras de antaño. El evento estuvo encabezado por el Rector Ramón García Rivera y Sergio Adrián Castañeda Alvarado, director del Centro de Desarrollo del Deporte Universitario.
UNA VUELTA AL PASADO
“Me dio mucha alegría regresar a los pasillos de nuestra querida Universidad donde crecí, aprendí y fui tan feliz en el hermoso edificio de lo que era el Instituto Juárez. Agradezco al Rector Ramón García por este reconocimiento que me honra y por generar este espacio que me permitió encontrarme con mis queridos amigos del deporte y sus familias; glorias, leyendas juaristas y duranguenses como Mario Galván, Manuel de Jesús Reyes “El Campanero”, Eduardo Campos, José Luis González “El Muegano”, Jesús “El Forro” Herrera, “Alfredo “El Gallito Gallegos, Jesús Lerma, Bety Blanco, Gerardo Avelar, con quienes compartí grandes momentos, anécdotas, derrotas, triunfos, aprendizajes hasta construir una hermandad y una gran Identidad Juarista”, dijo emocionado.
SUMAMENTE AGRADECIDO
Así mismo, agradeció a Sergio Castañeda, quien lo hizo recordar tantos momentos inolvidables que permanecen no solo en su mente, sino en su corazón, “aún recuerdo aquellos encuentros con las gradas llenas, el amor y respeto con el que jugábamos y representábamos a nuestra universidad. Jamás olvidaré cuando ganamos el campeonato nacional y fuimos recibidos con gran alegría y cuando logré encestar la primera canasta en el auditorio de la Preparatoria Diurna, momentos que me siguen llenando el alma, la mente y el corazón de alegría”, compartió.
EN SU VIDA Y EN SU CORAZÓN
Aunque no quiso recordar una anécdota en especial, ya que son muchas las que pudiera compartir y narrar, con una sonrisa agregó “siempre portamos el uniforme con gran orgullo y agradecimiento, en cada juego, competencia entregábamos el alma y nos llenaba de orgullo, era una forma de mostrar nuestra gratitud por nuestra amada universidad y por Durango. Mi gratitud y amor. Siempre a mi querida Alma Mater la Universidad guares del Estado de Durango. Goya UJED”, concluyó.